ICE busca más espacio para migrantes en vías de deportación

WASHINGTON.- Sin más cupo para el creciente número de inmigrantes en vías de deportación, la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE) busca espacios en cárceles en Ohio, Nuevo México, Colorado y Texas, un plan que contrasta con la idea de cerrar los centros de detención privados.

Bajo presiones políticas, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por su sigla en inglés) revisa el posible cierre de centros de detención privados para migrantes y prevé anunciar una decisión el mes próximo.

Pero esa revisión del concejo de asesores del DHS no ha frenado que las autoridades de ICE concedan o renueven contratos para albergar a aquellos en trámites de deportación.

En la actualidad, ICE tiene bajo su custodia a poco más de 40,000 migrantes a la espera de ser expulsados de EEUU, pero, según el diario “The Wall Street Journal”, la agencia necesita espacio para otros 5,000 en las próximas semanas.

ICE renovó el contrato de “Corrections Corporation of America” (CCA), que administra el centro de detención en Dilley (Texas) –donde hay poco más de mil detenidos- y, según el diario, la agencia ha dicho que necesitará $136 millones adicionales para las operaciones en los centros de detención hasta comienzos de diciembre.

Además, informes de prensa dan cuenta de planes del DHS de trasladar a inmigrantes a la cárcel del Condado Cibola, en Nuevo México, a cargo de la CCA y que fue cerrada por el Departamento de Justicia por su pésima trayectoria de atención médica para los presos.

El plan de abrir más centros de detención alimenta las perennes críticas de que la directora de ICE, Sarah Saldaña, está ayudando a empresas que se lucran del encarcelamiento de los inmigrantes indocumentados.

“ICE alega que necesita más camas y renovó un contrato en New Mexico, y eso nos preocupa mucho… la realidad es que hay una enorme cantidad de personas que solicitan asilo y deberían estar libres”, dijo Silky Shah, co-directora del grupo “Detention Watch Network”.

ICE ni siquiera ha terminado su revisión y sigue renovando o concediendo nuevos contratos para instalaciones privadas, y eso es muy preocupante, porque están apoyando a los que se lucran de este negocio de las detenciones”, enfatizó Shah.

Se suman los haitianos

El aumento en el número de arrestos en la frontera sur se debe al continuo flujo de inmigrantes que huyen de la violencia en Centroamérica y, desde 2015, a la llegada de miles de haitianos que huyeron del terremoto en su país en 2010 y que habían permanecido temporalmente en la región para cruzar México hasta EEUU.

Se prevé que en las próximas semanas, el número de haitianos detenidos a diario en la frontera sur alcance hasta 200.

En total, las autoridades prevén tener bajo su custodia y en vías de deportación a hasta 45,000 migrantes en los próximos meses, incluyendo personas con solicitudes de asilo.

El secretario de Seguridad Nacional, Jeh Johnson, confirmó la semana pasada la situación por la llegada de haitianos a la frontera sur, pero dejó en claro que el DHS reanudará “tan pronto sea posible” los vuelos para su deportación, “en cumplimiento con las prioridades existentes”.

Las deportaciones fueron suspendidas a raíz del huracán “Matthew”, que azotó Haití el pasado 3 de octubre. Esta política no afecta a personas amparadas bajo el Estatus de Protección Temporal, concedido por el terremoto de 2010 y que vence en julio de 2017.

Johnson dijo que el DHS realizará las deportaciones “lo más humanamente posible” y los haitianos que entren ilegalmente a EEUU “seguirán siendo enviados” a centros de detención.

El anuncio tiene especial impacto en el área de San Ysidro (California), adonde miles de haitianos han llegado desde otoño del año pasado.

En el año fiscal 2016, que concluyó el mes pasado, las autoridades fronterizas detuvieron a 408,870 inmigrantes indocumentados entre los puertos de entrada del país, un incremento respecto a los 331, 333 del año fiscal anterior.

detenidosfrontera

Además de operar sus propias cárceles, ICE también concede contratos a empresas privadas y gobiernos locales y estatales para el uso de centenares de centros de detención. En 2015, usó un total de 637 instalaciones.

ICE no ha respondido aún a una solicitud de este diario para comentar sobre los planes en ciernes.

¿Logrará Clinton cerrar los centros?

La aspirante presidencial demócrata, Hillary Clinton, ha prometido que, si gana, cerrará los centros de detención para familias y promoverá una reforma migratoria que ofrezca una vía hacia la ciudadanía.

Sin embargo, afrontará la ingente labor de trabajar con legisladores republicanos que exigen “mano dura” contra los indocumentados y se oponen a cualquier tipo de alivio migratorio para ellos.

En medio de un intenso año electoral, en el que los demócratas disputan la Casa Blanca e intentan recuperar el Congreso, la Administración Obama quiere enviar un mensaje inequívoco con la continua expulsión de “deportables”, según las categorías establecidas en 2014.

Aunque insiste en que respeta el debido proceso y el derecho de los inmigrantes a presentar sus casos de asilo, el gobierno también quiere dejar en claro que el combate a la inmigración ilegal por la frontera sur sigue sin frenos.

En esta nota

Frontera Inmigración inmigrantes indocumentados
Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain