Cinco tips para tener un baño altamente relajante
Alcanza la relajación total en la ducha, poniendo en práctica estos consejos
Luego de un día lleno de actividades y mucho estrés, lo primero que te viene a la mente es querer llegar lo más pronto a casa, despojarte de los zapatos y de todas esas prendas que te incomodan y meterte a la ducha para olvidarte de todo lo malo.
Sin embargo, no es suficiente permanecer bajo la regadera o dentro de la tina con agua caliente, durante varios minutos, para poder descansar, sino que se necesitan de una serie de elementos extras para conseguir este fin.
En seguida, encontrarás una serie de cosas que te ayudarán a tener realmente un baño relajante.
1. Sales y aceites
Para relajarte, opta por aceite de lavanda, jazmín o rosa; las sales ayudan a relajar y a reducir la rigidez muscular, y desintoxican la piel. Los echas cuando el nivel de agua esté a mitad.
2. Temperatura
Debes procurar que el agua esté tibia y no caliente. La temperatura ideal es de 92 grados Fahrenheit (33º C). Asegúrate de probarla (introduce uno o dos dedos) antes de sumergirte.
3. Cierra los ojos
Mantener los ojos cerrados te ayudará a entrar en una relajación profunda. Rodajas frías de pepinillo, bolsitas de té de manzanilla frías o compresas frías para los ojos te ayudarán a mantenerlos cerrados.
4. Velas
La luz brillante no ayudará a que te relajes, así que apaga las lámparas e ilumina el baño con velas (si son aromáticas, mejor).
5. Música
Escoge música tranquila a un volumen entre moderado y bajo para completar la atmósfera. Con los ojos cerrados, te ayudará a visualizar un lugar apacible para que llegues a tu nirvana.