Más vale confiar que comerse las uñas

Se sabe que en las series cortas y cuando la definición está a la vuelta de la esquina para entrar a la siguiente fase, es necesario hacer recortes en la nómina de un club, donde muchas veces no se da en el clavo, por lo que después las explicaciones no pueden ser muy razonables.

Como anillo al dedo le podría caer lo escrito más arriba a los Yankees de Nueva York, el equipo que terminó con la mejor marca en la Liga Americana de béisbol, coronado campeón de la División Este de ese joven circuito y que ahora enfrenta a los peligrosos Tigres de Detroit, titulares de la parte central de la misma liga.

En el Comerica Park de Detroit, el ganador de anoche tiene la ventaja de respirar profundo, mientras que el que está en vía de ser definitivamente descalificado para el resto de la contienda, deberá hacer cálculos para el año que viene o tratar de mejorar, para no repetir el mismo problema.

Abundando con el equipo local neoyorquino, el piloto Joe Girardi hizo recomendaciones que reconocemos no fueron fáciles para un club cuajado de ‘megaestrellas’ con los salarios más altos de una organización deportiva a nivel mundial.

Por eso hay que utilizar aquellos jugadores con los sueldos más altos para competencias importantes, aunque no reúnan las condiciones óptimas en estos momentos.

Por eso Girardi tiene previsto llevar a la lomita central del equipo de El Bronx a A.J. Burnett (11-11, 5.15) en el juego 4, clave para definir el pase a la siguiente ronda; o sea a la Serie de Campeonato de la Liga Americana, de donde saldrá el titular que más adelante disputará la Serie Mundial de béisbol ante el ganador de la Liga Nacional.

Resulta que Burnett, con uno de los salarios más altos de los llamados Bombarderos de El Bronx, ha estado de capa caída, por lo que se corre el riesgo de la duda.

Reconocemos que fue duro para el estratega local asumir esa decisión, pero no tuvo más remedio que sacar de la nómima al veterano Bartolo Colón para darle paso al derecho de 34 años de edad, a quien le quedan dos temporadas más para terminar su actual contrato múltiple.

Es cierto que Colón no lució como en sus mejores días en la recta final, tras regresar óptimo como abridor en esta clase de evento, luego de su operación en su brazo de lanzar.

Pero el veterano ‘lanzallamas’ quisqueyano, a nuestro entender, fue más confiable en el campeonato regular que Burnett, de quien se espera que hoy deba darle a la fanaticada de los Yankees, la satisfacción de confiar en él para el resto de su contrato multimillonario.

Girardi se dio gusto utlizando su cuantioso bullpen en los juegos finales del torneo, especialmente contra los Rays de Tampa Bay, equipo que le hizo ver claramente al piloto local que no se debe menospreciar al presunto débil.

Colón tiene mucho camino recorrido, en cuanto a pitcheo se refiere.

El manager de los Yankees debió mantener a Bartolo en la nómina, aunque sea en el grupo de relevistas, por si se necesita a alguien que dure más de dos innings como sustituto.

Mientras más experiencia, mayor sería la confianza y, por ende, la tranquilidad rondaría los predios de cualquier club en competencias cortas, como ahora.

Hay que saber que después de cumplir tres ganados, de los cinco pactados en estos momentos, no hay más oportunidad para el perdedor hasta el año que viene.

Chao.

constantino.viloria@eldiariony.com

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