Saúl MontielChef ejecutivo y propietario Gusto Ristorante y The Lexington Social

Saúl empezó a trabajar desde los 9 años en su natal Hidalgo, México. Huérfano de padre era ayudante de mecánico y vendía verduras en un mercado para ayudar a su madre que tenía un restaurante. “Crecí al lado de ella limpiando, ella me enseñó a limpiar un baño, a barrer, a mapear, a pelar tomatillos, chiles, cortar carnes. Aunque no era el mayor, -tengo un hermano mayor-, me sentía responsable porque tenía el nombre de mi papá y de mi abuelo y quería sacar a la familia adelante”, afirma Saúl, de 28 años.

Llegó a San José, California, con 14 años y poco después se mudó a Nueva York. Empezó de lavaplatos en el restaurante Diva y gracias al sacrificio de llegar dos horas antes y sus ansias por aprender en tres meses ascendió a ensaladero. “Mi meta nunca fue la plata, pero fue aprender porque me gustaba mucho como se veían los platos, conocer vegetales nuevos que nunca había visto y me los aprendí trabajando todos los días” sostiene.

En la vida, todo esfuerzo merece una recompensa y la suya le llegó con tan solo 19 años en el restaurante Tappo, donde se hizo chef por primera vez. “Ahí también llegaba temprano y sabía hacer el trabajo de todo el mundo y si alguien faltaba yo lo hacía. Un día la chef se despide con los dueños y me dicen: ‘Saúl queremos darte la oportunidad de llevar la cocina'”, recuerda.

Del restaurante Gusto se alimentan 42 familias de hispanos y europeos, que según Saúl son “muy trabajadores y les quiere dar una oportunidad”. Recientemente, se hizo propietario del restaurante The Lexington Social. Su especialidad es el Raviolo Al Ouva y los platos que le encanta degustar son los guisados mexicanos de El Paso Taquería.