Rafael Novoa regresa a la TV con ‘Talismán’
Miami/EFE – Rafael Novoa regresa a la televisión estadounidense con la nueva telenovela “Talismán”, en la que interpreta un personaje que, tal y como le gusta al actor colombiano, es complejo y no se reduce a las etiquetas de “bueno o malo”.
“Pedro es una víctima de la vida, de las circunstancias; él trata de ser un buen ser humano, de hacer las cosas como deben ser, pero todo se le va de las manos”, explicó el bogotano de 41 años sobre su personaje en la telenovela que transmite Univisión de lunes a viernes en horario estelar.
En su opinión, hay novelas rosas, pero nunca personajes de ese pálido color. Para él, todos los roles que encarna son una rica paleta de matices.
“Algunos protagonistas son demasiado perfectos. No me gustan los buenos-buenos ni los malos-malos; me gustan los personajes que tienen un poco de los dos”, añadió el actor, que comparte protagonismo en la telenovela con la actriz mexicana Blanca Soto.
En ese sentido explicó en Miami, donde se filma la telenovela, que para él “no existe un personaje simple; todos son seres de carne y hueso con diferentes facetas y cualidades, unas buenas y otras no tan buenas”.
De acuerdo con Novoa, éste es el único propósito de la actuación- Iluminar la naturaleza humana a la vez que se entretiene al público.
“Para ello, es importante, aún dentro de la fantasía, contar historias reales. Creo que es importante transformar las historias y darles más realismo. Soy de los que les gusta la palabra evolución; es hora de que la televisión evolucione”, señaló el actor.
Novoa, que también ha trabajado en las telenovelas “Pura Sangre” y “Mañana es para siempre”, además de los filmes “Póker” y “El silencio de los sapos”, realizó su debut como actor en 1995 en la novela “Flor de oro”.
Su papel era poco más que un extra con pocas líneas de parlamento. Sin embargo, su impactante presencia escénica y su soltura ante las cámaras llamaron la atención de los productores.
Un año más tarde, Novoa tenía a su cargo uno de los roles principales en la telenovela “Guajira”.
Sin embargo, fue su trabajo en “Las Juanas”, al lado de la actriz colombiana Angie Cepeda, el que lo convirtió en el galán número uno de las novelas de ese país en la década de los noventa.
Novoa, que además es un cotizado modelo, reconoce que su físico ha jugado un importante papel en su carrera como actor.
En cualquier caso, defiende que, aunque la apariencia es capaz de abrir una puerta, se necesita algo más para mantenerla abierta.
“Es cierto que todo entra por los ojos. Pero el físico no basta, no es garantía de que vas a tener una carrera. Tienes que demostrar talento, tienes que conocer el oficio. La belleza se acaba, el talento perdura”, aseguró.
Lejos de las cámaras y de los escenarios, Novoa se describe a sí mismo como un hombre “común y corriente”- “Soy más bien tranquilo y relajado; normal. Lo interesante de mí es mi trabajo”, aseguró.
“En mi tiempo libre me dedico a hacer las cosas que me gustan, como leer un buen libro, practicar un deporte, disfrutar de un buen filme. Cosas normales”, apuntó el actor, que también se describe como “antifarándula”.
En ese sentido explicó- “No estoy en esto para ser famoso. No soy amigo del brillo de la fama ni de las alfombras rojas. Amo mi trabajo, que es lo que me apasiona. Lo demás -la fama, la celebridad- viene por añadidura”.
