Demandan a empresa judía por discriminación

Luis Santana y Carlos Marchand, junto a su abogado Richard B. Ancowitz dieron a conocer ayer detalles de una demanda por discriminación contra la tienda de artículos de video y fotografía B&H.

Luis Santana y Carlos Marchand, junto a su abogado Richard B. Ancowitz dieron a conocer ayer detalles de una demanda por discriminación contra la tienda de artículos de video y fotografía B&H. Crédito: FotosL Humberto Arellano / EDLP

NUEVA YORK – Dos ex empleados presentaron ayer una millonaria demanda en contra de la prestigiosa tienda de aparatos electrónicos y de video B&H por presuntamente discriminarlos por el hecho de ser de origen hispano.

Luis Santana y Carlos Marchand, junto a su representante legal Richard Ancowitz explicaron ayer que la demanda – presentada ante la Corte Suprema del estado de Nueva York, lejos de tener tintes financieros, lo que pretende es sentar precedentes, a fin de detener el ambiente de humillación y discriminación que existe al interior de B&H.

“Trabajé para la empresa judía por más de 15 años y en todo tiempo me negaron cualquier tipo de promoción. Siempre que concursaba para otro cargo, que ofrecía un mejor sueldo, me decían que ya estaba ocupado”, dijo Santana.

No obstante -continuó el joven de origen dominicano- “si llegaba detrás de mí una persona de origen judío sin experiencia, ni conocimiento de los equipos electrónicos y de video, inmediatamente lo promovían a supervisor”.

Dijo además que siempre se le prohibió hablar español con sus demás compañeros de trabajo y que eran comunes las vejaciones y las bromas de contenido sexual en contra de las personas de origen hispano.

“Fui testigo de la forma en que trataban a las personas que se atrevían a hablar español. A ellos simplemente los echaban del trabajo”, indicó Santana.

Y no sólo eso. “Los sueldos para los trabajadores hispanos son muy inferiores en comparación con los sueldos de las personas de origen judío”, acotó Santana.

Por su parte, Marchand, quien trabajó por seis años para B&H, criticó a la empresa de aplicar una doble política, pues con los clientes demuestran una cara amable y atenta, “pero con los trabajadores de origen hispano siempre les gritan y los ofenden por cualquier razón o motivo. Es hora de que B&H aprenda la forma en que debe tratar a la gente que no es de su raza (sic)”.

Los demandantes dijeron que fueron despedidos después de exigir un mejor trato hacia las personas de origen hispano.

Llamadas realizadas a los representantes de B&H no fueron contestadas.

Para el abogado Ancowitz la demanda -la cual situó en varios millones de dólares- pretende llamar la atención a las demás personas de origen hispano que trabajan para B&H y que, por temor a ser despedidos, han preferido mantenerse en silencio.

“Que quede claro. La demanda no tiene nada que ver con religión. Tiene que ver con el respeto a los derechos de los trabajadores”, dijo Ancowitz.

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