La propuesta educativa de la Portavoz Quinn
La educación fue uno de los temas centrales del mensaje sobre el “estado de la ciudad” de la Portavoz del Concejo Municipal Christine Quinn el pasado jueves.
Quiero enfocar esta columna en su propuesta de hacer llegar $71 millones adicionales a los colegios comunitarios de CUNY. Estos fondos estarían destinados para mejoras de construcción y remodelación. Ejemplos de estos proyectos son remodelaciones para hacer accesibles los edificios a personas con impedimentos, rediseños de salones de clase para incorporar el uso de la tecnología, y el mantenimiento básico de edificios que fueron construidos hace más de 50 años atrás y que ya comienzan a demonstrar su deterioro, entre otros.
Las leyes del Estado de Nueva York obligan a que todos los proyectos de mejoras de capital para los colegios comunitarios obtengan la mitad de los costos de fondos estatales y la otra mitad de fondos de la ciudad. Aún cuando el Estado ha presupuestado $71 millones para estos proyectos, si la ciudad no parea esta cantidad no se pueden utilizar los fondos y los proyectos quedan paralizados. Si la propuesta de Quinn es acogida, la inyección de fondos a colegios como Hostos CommunityCollege sería de $142 millones (combinando los fondos estatales y federales).
Como le he recordado a los lectores deEl Diario en el pasado, la mayoría porcentual de estudiantes latinos y afroamericanos en CUNY se encuentra en los colegios comunitarios. Por lo tanto, debemos memorizar esta regla: apoyar a los colegios comunitarios de CUNY es igual a apoyar la educación y el futuro de la comunidad afroamericana y latina en Nueva York.
Aparte del apoyo a la educación universitaria en la ciudad, la propuesta de Quinntiene tres virtudes adicionales. Primero, todos esos proyectos de construcción y remodelación van a generar más empleos en un momento cuando la economía de la ciudad permanece frágil. En el caso del Bronx, condado con el porcentaje más alto de desempleo, estos proyectos de renovación y mejoras traerán cientos de empleos al condado.
La segunda virtud es que, dada la feroz competencia para conseguir contratos de construcción, probablemente los costos de realizar estos proyectos sean más bajos que lo originalmente programado. Por lo tanto, los fondos de capital rendirán más este año próximo, que si se asignaran de aquí a dos o tres años. Esto hará posible que se completen más renovaciones y mejoras, redundando en beneficios para nuestros estudiantes y empleados.
La tercera virtud será el mejoramiento eninstalacionesque disfrutan todos los neoyorquinos y no solamente los estudiantes o empleados de CUNY. ¿Cuántos de ustedes no han asistido a una feria de empleo, a un seminario, a una vista pública en alguno de nuestros colegios?
Cuando la infraestructura de CUNY mejora, no sólo beneficia a los estudiantes, sino que beneficia a miles de personas de la comunidad que utilizannuestras facilidades.
Aplaudimos la iniciativa de la Portavoz Quinn de apoyar a CUNY. Mejorando a CUNY ganamos todos en la ciudad y garantizamos una mejor calidad de vida para todos los neoyorquinos.
