Arroz con pollo para niño con bala incrustada
Armando Bigo, quien fue herido la semana pasada en El Bronx, tendrá que esperar a ver si el proyectil se mueve
Armando Bigo tendrá que vivir por ahora con la bala incrustada en su hombro. Crédito: Suministrada
Nueva York – Armando Bigo, el niño de 8 años que fue herido de bala la semana pasada en El Bronx, fue dado de alta ayer del hospital y regresó a su casa para disfrutar de su comida preferida: el arroz con pollo de su mamá.
Armando tendrá que vivir con la bala incrustada en su cuerpo porque, según reportó el New York Post, los doctores decidieron no retirar el proyectil para evitar complicaciones médicas, ya que quedó incrustado en el hueso de su hombro, cerca del cuello.
Aunque los doctores no decidieron retirar la bala, han indicado que una vez que el pequeño comience a mover el brazo en la comodidad de su casa, el proyectil puede que se mueva a una zona que haga más fácil su retirada mediante una cirugía en el futuro. Mientras tanto, Armando está usando sus juguetes y según sus familiares está ansioso de volver a la escuela en El Bronx.
El acusado de disparar el arma es un adolescente hispano de 15 años identificado como Eduardo Rodríguez, quien se alega pertenece a una pandilla, y quien ahora enfrenta cargos por intento de asesinato y posesión ilegal de un arma de fuego, entre otros.
