Amor… ¿para toda la vida?
Difícil de lograr, pero te brindamos algunos consejos.
¿Qué el amor y pasión en una pareja se acaba con el paso de los años? Esa es una situación que desafortunadamente a algunas personas les sucede, pero como muchas cosas en esta vida, ‘cada quien cuenta cómo le va en la feria’, por lo que no podemos decir que esto sea una casi regla universal.
Por el contrario, hay gente que aprovecha el tiempo a su favor y con el paso de los años construye historias de amor que son sencillamente increíbles.
Y esto no es un invento o una ilusión. Un estudio realizado por el Instituto Kinsey para la Investigación en Sexo, Género y Reproducción de la Universidad de Indiana (E.U.A), realizado en más de mil parejas en los cinco continentes, cuyas relaciones tenían más de veinte años de unión, muestra que con el paso del tiempo se fortalece la relación, ya que permite conocerse de mejor forma y este aprendizaje se refleja en su convivencia.
Por otro lado, también indica que las parejas que se abrazan y besan frecuentemente, manifiestan tener una mejor vida íntima.
‘El amor para toda la vida’, más de ser una frase común y multicitada en cintas y dicha en cientos de programas televisivos, es algo a lo que la gran mayoría de las mujeres y hombres aspiramos, pero que percibimos casi imposible de lograr. Encontrar historias de personas que han tenido la fortuna de compartir su vida con otro, nos motiva a pensar que esto no es tan imposible de conseguir, pero ¿cómo lo lograron?
Antes de pensar en el futuro o pretender proyectar un plan de vida compartido, es conveniente hacer una pausa y valorar la manera en la que en el presente cuidamos y fortalecemos nuestra relación. Es imposible pensar en futuro, cuando en el día a día no cuidamos el lazo que nos une y por el contrario, olvidamos los detalles de convivencia que pulen el trato y facilitan la comunicación.
Christine Carter, autora del libro El aprendizaje de la felicidad de Editorial Urano, comparte tres pasos para cuidar nuestra relación de manera cotidiana:
1. Construye un vínculo de cariño y afecto. Esto puede lograrse a partir del modo en el que tratamos a nuestras parejas y la forma en la que le transmitimos el compromiso que tenemos hacia la relación. Cuida las palabras y los modos en los que te comunicas, esto es clave.
2. Sé consciente y muéstrate sensible al respecto- de los problemas que está atravesando el otro. “El principal pronóstico de la satisfacción de una esposa en su matrimonio, según un estudio centrado en parejas con hijos pequeños, son el afecto y los miramientos del marido”, expone la autora. Si no hay hijos, toda tu atención la puedes enfocar en las áreas que sabes son vulnerables para ambos.
3. Enfoca los problemas como algo que los pueden controlar y resolver en equipo. Nunca son ‘sus’ problemas, siempre deben ser ‘nuestros’.
Christine Carter asegura que la cantidad de tiempo que dediquemos a nuestra relación de pareja dará frutos, por lo que no hay que minimizar nada, todo vale y todo impacta de cierto modo al lazo que nos une, así que hay que estar atentos a no permitir que la falsa seguridad sobre tener su amor, nos haga olvidar que es en la vida cotidiana donde se construyen las relaciones.
¿Cómo se puede pensar en un ‘amor para toda la vida’ cuando no se puede con el día a día? Hazle saber qué deseas conocer sus ilusiones, retos, sueños y conflictos, y así ambos construyan esa historia de amor que tanto desean tener.
Para ver:
• Diario de una pasión, dirigida por Nick Cassavetes (2004).
• Elsa y Fred, dirigida por Marcos Carnevale (2005).
“Conocerte a ti mismo, esculpe tu carácter”.
Bojorge@teleton.org.mx