Gobierno no quiere más violencia
Lima/EFE – El objetivo del Gobierno peruano “es que no haya un muerto más en Cajamarca”, declaró el ministro del Interior, Wilfredo Pedraza, en referencia a la prórroga del estado de emergencia en esa jurisdicción y a las reacciones negativas de sus autoridades a esa medida.
La región de Cajamarca se encuentra en estado de excepción (emergencia) desde mayo pasado debido a las violentas protestas por el rechazo al proyecto minero Conga, que causaron cinco muertos durante enfrentamientos de manifestantes con la policía.
Pedraza declaró ayer, tras un acto público en Lima, que esperaba que el presidente regional de Cajamarca, Gregorio Santos, “reflexione”, después de que criticase la extensión por 30 días del estado de emergencia y anuncie el fin de las conversaciones con mediadores del gobierno.
“El presidente de la República ha optado por la peor decisión y con esto agudiza el conflicto y corta todo tipo de acercamiento hacia la población”, manifestó ayer Santos en una rueda de prensa en Cajamarca.
A su turno, el presidente del Frente de Defensa Ambiental de Cajamarca, Wilfredo Saavedra, una de las organizaciones que rechaza el proyecto minero, anunció que retomarán las marchas y las medidas de protesta cuando concluyan los 30 días de la prórroga del estado de emergencia.
De otro lado, el gerente de la Cámara de Comercio y Producción de Cajamarca, Luis Céspedes, dijo que “el Estado está brindando seguridad, respeto al estado de derecho y a la ley, garantizando el libre tránsito y el normal desarrollo de las actividades”, con la prórroga del estado de emergencia.
El alto comisionado de la Oficina Nacional de Diálogo y Sostenibilidad del gobierno peruano, Vladimiro Huaroc, reconoció que Perú no puede resolver los conflictos sociales de la manera como lo estaba haciendo hasta ahora, en declaraciones al diario La República.
Huaroc explicó que el Gobierno peruano requiere una respuesta unitaria, que ofrezca “presencia del Estado en los escenarios de crisis con programas sociales”.
