Piden juicio justo a oficiales genocidas
Zury Ríos (c), hija del general golpista Efraín Ríos Montt, junto a familiares y amigos realizan una protesta pacífica. La misma fue disuelta debido a la lluvia. Crédito: Saul Martínez / EFE
Guatemala/EFE – Familiares y amigos de generales retirados que tienen procesos abiertos en Guatemala por delitos de genocidio, entre ellos Efraín Ríos Montt, realizaron ayer una protesta pacífica para demandar a los tribunales juicios justos.
Más de 200 personas, entre ellas Zury Ríos, hija del general golpista Ríos Montt, caminaron desde la antigua escuela politécnica hasta el obelisco, en el sur de la capital, en apoyo a sus familiares detenidos.
Debido a la lluvia que azota la ciudad, la marcha duró poco, pero fue suficiente para que los familiares y amigos expresaran su apoyo a los exmilitares y demandaran a los tribunales que los juicios sean justos.
En defensa de su padre, Zury Ríos escribió en su cuenta de Twitter que “Ya Guatemala está cansada de los radicales, de los recalcitrantes, de los intolerantes, de los que viven de la industria de la guerra sucia”.
“Dónde están los logros, las grandes conquistas sociales que estos ideólogos propugnaban en defensa de los y las ciudadanas de este país” y “cuántos subversivos han promovido mejoras en salud y educación? ninguno, porque prefieren que la sociedad y las víctimas vivan en la ignorancia”, apuntó.
Ríos Montt, quien fue jefe de Estado de facto entre 1982 y 1983, tiene abierto dos procesos judiciales por delitos de genocidio y de lesa humanidad, y desde enero pasado, cuando se presentó de forma voluntaria a la justicia, se encuentra en arresto domiciliario.
Al exdictador le imputan la muerte de 201 campesinos en una matanza perpetrada por el ejército en 1982 en el norte de Guatemala.
También su participación en el asesinato de más de 1,700 indígenas ixiles durante el conflicto armado en el noroeste del país centroamericano.
Por este último caso están detenidos los exgenerales José Rodríguez y Héctor Mario López Fuentes, pero ambos están recluidos en un hospital militar debido a quebrantos de salud.
Los ex altos cargos han interpuesto una serie de incidentes judiciales para evitar ser juzgados.
El pasado 30 de agosto, una Sala de Apelaciones negó en definitiva a Ríos Montt un amparo a través del cual pretendía beneficiarse de una amnistía aprobada en 1996.
Los magistrados determinaron que la Ley de Reconciliación Nacional, invocada por Ríos Montt para no ser procesado como “autor intelectual” de la conocida como “Masacre de Las Dos Erres” perpetrada por el Ejército guatemalteco en diciembre de 1982, no aplica para delitos de genocidio y deberes contra la humanidad.
La amnistía también ha sido negada a Rodríguez y López por los tribunales.
El conflicto armado, que acabó el 29 de diciembre de 1996 con la firma de los Acuerdos de Paz entre el Gobierno y la guerrilla, dejó unas 250,000 víctimas, entre muertos y desaparecidos.
