Niñeras hispanas sienten temor tras asesinato de niños en NY
Muchas cuidadoras temen perder su trabajo como consecuencia del caso que envuelve a una niñera dominicana
Lucía y Leo Krim, de 6 y 2 años, fueron encontrados muertos a puñaladas el jueves en la noche. Crédito: AP
Manhattan – El caso de la niñera dominicana Joselyn Ortega, quien es la principal sospechosa de apuñalar a dos niños que cuidaba en el Upper West Side, podría dificultar el empleo de nodrizas, pero no sólo a las hispanas.
Ortega permanece en coma en el hospital Cornell Presbyterian, por lo que no ha sido interrogada por la policía sobre la muerte de Lucía y Leo Krim, de 6 y 2 años. Ella fue recomendada a los padres de los infantes, por su hermana Celia, quien también es niñera y declaró a The Daily News que daría su vida porque la de los chicos.
La incertidumbre reina entre las cuidadoras de niños.
La mexicana Margarita López, de 41 años, con más de una década cuidando hijos de otros, sabe la gran responsabilidad de hacerlo.
“Muchas de nosotras tomamos este empleo sin estar preparadas por la necesidad del dinero, pero no sólo debes tener mucha paciencia sino cuidarlos mejor que tus propios hijos”, dijo López quien teme que muchas parejas se cierren a contratar más niñeras.
“Como madre, yo estoy de acuerdo a que nos hagan chequeos de antecedentes y psicológicos no sólo a las hispanas, sino a todas, porque uno no paga para que maltraten a los niños”, dijo.
Para la ecuatoriana Marcia Luque quien ha sido niñera por los pasados siete años, “lo que pasó hará que sea peor de lo que es ahora conseguir empleo de niñera”, pero es algo que afectará a todas por igual.
Ella recomienda a los padres ser más exhaustivos para determinar a quién meten en su casa.
“Récord de huellas dactilares, examen sanguíneo para comprobar que no usan drogas o examen psicológico es algo que acostumbran pedir las agencias de empleo. Pero especialmente los hispanos, se confían sólo en que un amigo recomiende a la niñera y no hacen estos chequeos”, dijo Luque.
La familia Krim revisó el historial policial y psicológico de Ortega, quien era ciudadana americana, antes de contratarla, aseguró The Wall Street Journal.
