Libertad condicional a Ostreicher tras 18 meses preso en Bolivia

La Paz.- En la audiencia celebrada hoy, la número 30 de este proceso judicial, se tomaron en cuenta pruebas antes descartadas, como las obtenidas tras la desarticulación en las últimas semanas de una red de funcionarios extorsionadores de la que supuestamente fue víctima Ostreicher.

El abogado de Ostreicher, Yimy Montaño, afirmó a Efe que su defendido ha recibido con enorme alegría la decisión judicial y que se encuentra “un poco más tranquilo”, a lo que también ha contribuido la presencia de su esposa, a la que no veía desde hace nueve meses porque hubo de retornar a Estados Unidos.

Ostreicher, de 53 años, llegó a la vista protegido con un casco, chaleco antibalas y en medio de un fuerte dispositivo policial, toda vez que sus abogados defensores han denunciado que temen por su vida.

Según el letrado, el estadounidense regresará para recibir el alta a la clínica de Santa Cruz en la que lleva casi un mes ingresado a causa del deterioro de salud sufrido durante su encarcelamiento, y esta tarde o mañana se trasladará a su domicilio.

El arresto domiciliario dictado por la jueza, que también ha impuesto una fianza de 100,000 bolivianos (unos 14,300 dólares), se extiende desde las 22.00 a las 06.00 horas, por lo que Ostreicher tendrá libertad de movimiento durante el día, indicó Montaño.

Además, cada 15 días deberá presentarse ante el ministerio público, a la espera de que se fije fecha para una nueva audiencia de la que el abogado espera que su defendido salga en libertad sin cargos para poder regresar a su país.

La investigación, explicó, podría concluir en el plazo de un mes.

Montaño anunció que va a solicitar un permiso temporal para que Jacob Ostreicher pueda viajar a Estados Unidos a ver al resto de su familia.

La jueza Enea Fátima Gentile, que hoy ha otorgado la condicional a Ostreicher, es la misma que le denegó esta medida el pasado 23 de noviembre, días antes de que trascendiera la existencia de la red de extorsión que supuestamente exigió al empresario $50,000 a cambio de su libertad.

Por el caso ya han sido enviados a prisión varios exfuncionarios y fiscales, entre ellos Fernando Rivera, que fue asesor jurídico del Ministerio de Gobierno de Bolivia y era el presunto cabecilla de la red.

En declaraciones a los medios en Santa Cruz, Ostreicher agradeció al presidente Evo Morales porque, según dijo, “tan pronto como se enteró de esta red de corrupción y extorsiones que estaba operando en el país, él pidió una investigación inmediata”.

Agregó que “para cuando esta investigación termine, probablemente habrá al menos otras diez personas detenidas”.

Un tribunal anuló la semana pasada el fallo inicial de la jueza Gentile y le volvió a remitir el caso para que tomara una nueva decisión teniendo en cuenta las pruebas más recientes.

Montaño precisó que otra de las razones que se han valorado hoy es que había expirado el plazo de 18 meses que establece la ley boliviana para mantener a una persona presa sin presentar cargos oficialmente.

Jacob Ostreicher llegó a Bolivia hace cuatro años para invertir, junto con varios socios, 26 millones de dólares en la producción de arroz en Santa Cruz.

Fue detenido en junio de 2011 acusado de presunto blanqueo de capitales, después de que dos empleados suyos fueran apresados por su presunta relación con el narcotráfico.

Una de esas empleadas, la colombiana Claudia Liliana Rodríguez, ahora encarcelada en el penal de Palmasola, supuestamente compró terrenos del narcotraficante brasileño Maximiliano Dorado para sembrar el arroz de Ostreicher, según ha publicado la prensa boliviana.

Dorado fue detenido por la Policía de Bolivia a finales del 2010 y deportado a su país, y Ostreicher siempre ha negado tener ninguna vinculación con él.

El caso de Jacob Ostreicher cobró relevancia internacional después de que dos congresistas estadounidenses y el actor Sean Penn se interesaran y viajaran a Bolivia para visitar al empresario y denunciar su prolongado encarcelamiento.