Expolicías hispanos ingresan a la cárcel para iniciar condena
Keneth Moreno y Franklin Mata tendrán que pasar un año y 60 días en prisión por mala conducta
Kenneth Moreno (iz.), y Franklin Mata. Crédito: AP
Nueva York – Dos expolicías hispanos de Nueva York, que fueron absueltos del delito de violación el año pasado, comenzaron a cumplir este jueves sus condenas por mala conducta luego de que los tribunales rechazaran sus apelaciones.
Un jurado determinó en agosto de 2011 que Keneth Moreno y Franklin Mata no eran culpables de violación, pero sí de conducta oficial indecorosa y fueron sentenciados a un año y 60 días de prisión, respectivamente.
Ambos apelaron su condena sin éxito, y, tras este revés, Mata, que fue sentenciado además a tres años de libertad condicionada, decidió presentarse este jueves para cumplir su condena.
Sin embargo, Moreno volvió a apelar su condena de un año y acudió este jueves ante la corte federal en Manhattan alegando que la evidencia presentada durante el juicio no probó que él hubiese violado a la mujer.
El tribunal federal atendió su caso con prontitud, fallando también en su contra.
El juez ordenó que Moreno fuera arrestado si a las 4 de la tarde, hora local, no se presentaba para cumplir su condena.
Ante esta situación, Moreno acudió a la Corte Criminal para comenzar a cumplir desde este jueves el año de cárcel, informó la Fiscalía de Manhattan.
Los expolicías habían sido absueltos además por el jurado de otros delitos que se les imputaban como robo o falsificación de documentos.
La acusación sostenía que en la noche del 6 de diciembre de 2008 una mujer, de entonces 27 años, tomó un taxi en Brooklyn en estado de ebriedad para trasladarse a casa, y el conductor, al observar que era incapaz de abandonar el vehículo por sus propios medios, llamó al 911 para que la ayudaran.
Indicaba además que los entonces policías salieron unos minutos después del apartamento de la mujer, pero que volvieron en otras dos ocasiones.
La acusación señaló también que Moreno sostuvo relaciones sexuales con la mujer pese a que estaba borracha, mientras Mata vigilaba en el apartamento.
La mujer denunció al día siguiente que había sido violada y recibió asistencia médica en un hospital neoyorquino.
