Reforma Migratoria sin canto de victoria

A pesar de ser aprobada por el Senado, el proyecto de ley de inmigración enfrenta varios cambios que podrían poner en riesgo la legalización de los indocumentados

PWashington, D.C.- Fue una celebración emotiva pero efímera. Los gritos de alegría y aplausos por la aprobación de la reforma migratoria en el Comité Judicial del Senado, dieron paso a nuevas reuniones y más trabajo en el Congreso.

Republicanos y demócratas aseguraron este miércoles que debían trabajar juntos para modificar el proyecto de ley sobre reforma migratoria en varios puntos. Cambios en el flujo futuro de trabajadores e impuestos atrasados, son algunos de los temas pendientes en el Senado.

Mike Lee (R-UT) está interesado en que se calcule cuánto deben los indocumentados en impuestos, antes de su legalización. Esto tiene el potencial de dejar en las sombras a millones de personas que no puedan financiar el costo.

Consultado por La Opinión, el senador Jeff Flake (R-AZ) explicó que “todavía queda mucho trabajo por delante en el pleno del Senado y habrán varios cambios importantes”.

Además, los sindicatos de las agencias gubernamentales que ejecutan la política de inmigración (ICE y USCIS) se oponen al proceso de legalización en la propuesta migratoria. Eso plantea problemas futuros para la implementación del plan, que probablemente se deban remediar ahora, con nuevas negociaciones.

Otra área de conflicto es el flujo de trabajadores profesionales. La reforma aprobada por el comité judicial incluyó cambios que ampliarán los cupos para este tipo de inmigrantes y darán más libertad a las empresas para contratarlos. La unión de sindicatos AFL-CIO no está cómoda con estos cambios.

“Algunas veces hay cosas que no les gustan, pero se dan cuenta de la importancia de esta legislación. Nuestra meta es obtener 70 votos”, dijo Charles Schumer (D-NY).

El Senado completo debatirá la reforma migratoria en junio y se espera que antes del verano ya se tengan un voto final. En la Cámara de Representantes la situación por ahora es de pura incertidumbre y no está claro qué tipo de propuesta salga de ahí. De eso dependerá el futuro de la reforma. Las dos asambleas deben llegar a un acuerdo.

La reforma migratoria ganó su primera batalla, pero no la guerra. Todavía quedan grandes obstáculos que superar. El acceso a salud es uno de ellos.

“El senador Orrin Hatch (R-UT) tiene algunas enmiendas y le prometí que trabajaríamos juntos. Tenemos que llegar a un punto de consenso. Hay muchos temas que aparecerán en el pleno del Senado, pero el hecho de que nuestra coalición se mantuvo tan bien, nos augura un buen futuro”, dijo Charles Schumer (D-NY) a La Opinión.

Entre las propuestas de Hatch está prohibir el acceso de las personas que se legalicen a beneficios públicos y una espera de 15 años antes de que puedan disfrutar de los subsidios para comprar seguro médico. La reforma sanitaria aprobada en 2010 obliga a todos los ciudadanos y residentes permanentes a tener cobertura.

Este punto ha causado grandes divisiones en la Cámara de Representantes. Ahí se negocia una reforma migratoria paralela al Senado.

Fuentes demócratas en la Cámara Baja aseguraron a La Opinión, que las reuniones siguen abiertas. Hasta el momento la propuesta es que los inmigrantes que se legalicen tengan su propio seguro médico, sin ayuda federal. Si por alguna razón acceden a servicios médicos financiados por el Gobierno, entonces no podrán tener su residencia permanente.

“Estamos tratando de que en los casos extremos exista una alternativa. No es justo que básicamente se deporte a alguien, porque está gravemente enfermo”, aseguró.

Cada día la posibilidad de lograr un acuerdo se hace más difícil y los actores principales se echan la culpa mutuamente por la falta de consenso. Hay fuentes vinculadas con las negociaciones que ven otros motivos en la discordia.

“Existen muchas personas que están más preocupados por la política, que por la comunidad. Prefieren forzar a los republicanos a una situación incómoda, que encontrar una solución que satisfaga a ambos partidos. Salud es un problema, pero no es lo más importante”, explicaron.

“Si la Cámara de Representantes no tiene una alternativa, entonces tendremos que considerar el proyecto de ley del Senado”, dijo Steny Hoyer (D-MD) quien integra el liderazgo demócrata en la Cámara Baja.

Todavía no está claro qué pasará en esta asamblea. Se espera que la situación se defina en los próximos días.

Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain