Lucy Méndez: Adolescente de la tercera edad

Nueva York — Para Lucy Méndez la edad es como las nubes, imprecisa y cambiante, todo depende del ánimo que gobierne al espíritu.

A la puertorriqueña, de 65 años, no le gusta el término ancianita, le parece deprimente y poco acertado para su jovial actitud.

Recientemente la mujer fue elegida como la reina del carnaval caribeño del Centro Diana Jones, en Bushwick, su vecindario de toda la vida. A su edad, Lucy se siente hermosa y es conocida por su activo voluntariado en la comunidad latina.

¿Ser voluntaria de programas comunitarios es parte de su secreto para mantener la alegría frente a la vida?

Participo en el centro Diana Jones hace tres años y ayudar a personas de mi edad me fortalece, porque soy parte de su vida y juntos formamos una gran familia. Sentirse útil a esta edad es vital, generalmente imperan prejuicios acerca de nuestra habilidad para continuar aportando en una sociedad tan cambiante.

Mi esposo Ángel Méndez, que también fue elegido como el rey del Centro Diana Jones para el carnaval caribeño, es mi pilar. Hemos estado juntos por décadas y hemos visto como nuestro vecindario ha cambiado, pero no nos hemos mantenidos relegados en los grandes sucesos de los últimos años, al contrario, somos parte de ellos.

¿Qué tan importante es el baile para mantener su espíritu jovial?

Como puertorriqueños nos encanta el baile y la fiesta. Mi esposo y yo participamos en programas de baile al son de la música de países diversos. Al convivir con personas de diferentes nacionalidades, hemos aprendido a apreciar la cultura de los residentes de Bushwick. Mantenernos unidos en un vecindario con grandes carencias es importante si queremos hacer cambios.

¿Qué la motiva a continuar activa en su vecindario?

La alegría de mis compañeros del Centro Diana Jones y el apoyo que ellos me brindan. A mi esposo y a mí nos eligieron reyes por votación de entre 15 parejas. Fue un detalle conmovedor. Somos conocidos como el rey sol y la reina tierra.

¿Por qué se identifica como adolescente de la tercera edad?

Porque la edad la dicta el espíritu, no la fecha de nacimiento. Hay personas jóvenes cansadas de la vida y viejitos llenos de vida. Mi actividad diaria es bailar, ejercitarme, aprender, conversar y hasta jugar. Sentarse en una silla es para ancianos, yo estoy demasiado joven para eso.