Niños indígenas Triqui triunfan en mundial de minibásquet

La Selección Indígena de México, formada por niños de la comunidad Triqui de Oaxaca, lideró el IV Festival Mundial de Mini-Baloncesto, obteniendo un récord de siete victorias y ninguna derrota

El próximo reto del equipo de básquet de niños indígenas Triquis es la Copa del Caribe, que se llevará a cabo en República Dominicana.

El próximo reto del equipo de básquet de niños indígenas Triquis es la Copa del Caribe, que se llevará a cabo en República Dominicana. Crédito: Twitter

MÉXICO, D.F.- Nada más se quitaron los tenis y comenzaron a encestar, o más bien dicho, a volar. Un partido tras otro, la selección de niños indígenas Triquis se hicieron de siete victorias y el título de campeones del IV Festival Mundial de Mini-Baloncesto, que se llevó a cabo en Argentina del jueves 10 hasta el 14 de octubre.

El triunfo del equipo Triqui durante el último partido este domingo no es poca cosa si se toma en cuenta que juegan descalzos, y hasta mediados del 2010 eran sólo unos chiquillos asustados por los asesinatos en la región más violenta y pobre del estado de Oaxaca donde de un tirón se pueden llevar entre las balas hasta 30 personas, como ocurrió en San Juan Copala.

Por aquellos días, los chicos de entre seis y nueve años comenzaban a integrar su primer equipo en el poblado de Río Venado, de unos 2,000 habitantes, con ayuda del profesor deportivo Sergio Zúñiga, oriundo del Distrito Federal, cuando mataron a uno de los líderes de la región que los apoyaba.

Heriberto Pazos, del Movimiento de Unificación de Lucha Triqui, una organización fundada en los 1980s para presionar al gobierno a dar apoyo contra la pobreza, fue emboscado por dos motociclistas desconocidos, pero ya los pequeños basquetbolistas estaban encarrerados sin zapatos.

Descubrieron que los tenis les estorbaban cuando al llegar a su primer torneo nacional en Aguascalientes, hace tres años, simplemente no atinaban ninguna pelota en el aro y sus movimientos eran torpes, tiesos, sin gracia. Ellos están acostumbrados a hacer su vida descalzos.

El entrenador pidió permiso a los organizadores para que los niños jugaran “a raíz”, y así comenzaron a crecer.

El 2013 ha sido su año. En marzo se coronaron campeones en el Youth Basquetboll of América (YBOA) en Monterrey. De ahí saltaron a la YBOA que se celebró en julio en Orlando, donde quedaron en segundo sitio, antes de ganar en el IV Festival Mundial de Mini-Baloncesto en Argentina.

Con este reciente triunfo, siguen imparables para la Copa del Caribe que se llevará a cabo en República Dominicana del 30 de octubre al 5 de noviembre.

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