El estrés durante las fiestas
La tensión puede empeorar la pérdida de memoria entre las personas mayores.
Las vacaciones de Navidad son una oportunidad para visitar a familiares y amigos que no vemos frecuentemente. Debe tomar ventaja de la visita para percatar si hay cambios físicos en personas mayores de edad, como pérdida de la memoria.
El olvido y el envejecimiento a menudo van de la mano, y la fiebre de las vacaciones y el estrés pueden empeorar las cosas.
“Las situaciones estresantes pueden causar pequeñas pérdidas de la memoria sin importancia”, según la Dra. Mariana Dangiolo, profesora de Medicina Familiar y Geriatría en la Escuela de Medicina de la Universidad de la Florida Central (UCF). “Desafortunadamente, el temor a la demencia, como el Alzheimer, impide que muchas personas consulten con sus médicos por la pérdida de memoria“.
Entender la diferencia entre el envejecimiento normal y los trastornos de memoria más graves es el primer paso para reducir el estrés, explicó la Dra. Dangiolo.
La experta dice que experimentar una pequeña pérdida de memoria a medida que envejecemos puede ser normal, sobre todo bajo ciertas condiciones. Un 60% de las mujeres con menopausia presentan cierta dificultad para recordar información común, como nombres y números de teléfono o por qué entraron en una habitación.
Ese tipo de pérdida de memoria, que ocurre con la edad, puede incluir olvidar nombres que se recuerdan más tarde o perder cosas de vez en cuando, como los anteojos y las llaves.
En cambio, los primero síntomas comunes del mal de Alzheimer son más graves y específicos. Éstos pueden incluir:
- Pérdida de memoria, sobre todo cuando se trata de nueva información.
- Problemas para planificar o resolver problemas (seguir una receta de cocina, hacer pagos de las facturas mensuales, etc.)
- Dificultad para completar tareas en el hogar, en el trabajo o durante el tiempo libre.
- Confusión relacionada con la hora y lugares.
- Dificultad para comprender imágenes visuales.
- Nuevas dificultades para hablar o escribir.
Si usted o un familiar está experimentando pérdida de memoria, no asuman automáticamente lo peor. Es importante tener en cuenta que hay varios medicamentos que causan deterioro de la memoria y pueden crear o agravar los síntomas de Alzheimer.
Estos medicamentos comúnmente se usan para aliviar los cólicos intestinales o irritabilidad de la vejiga y son etiquetados como “anti-espasmódicos” o “anticolinérgicos”, y muchos se venden sin receta médica.
Existen otros 17 tipos de medicamentos utilizados para muchos otros propósitos que también pueden tener estos efectos, tales como antieméticos, antihistamínicos, antiácidos, medicamentos anti parkinsonianos, antidepresivos, relajantes musculares y antipsicóticos.
Si usted ha notado un cambio reciente en su memoria, consulte a su médico, quien podrá evaluar su estado general de salud y determinar la naturaleza del problema.
No hay “cura” para la demencia, pero los médicos pueden ayudar a controlar los síntomas e incluso retrasar la progresión. Algunas medicinas para el mal de Alzheimer son los inhibidores de la acetilcolinesterasa, como Tacrine, Rivastigmine, Galantamine y Donepezil.
Además, una consulta con un psicólogo y/o psiquiatra podrá ayudar con los cambios del comportamiento y las reacciones emocionales propios de la demencia.
Es importante comprender la diferencia entre el olvido normal y señales de alerta temprana de enfermedades más graves.