Presupuesto estatal causa divisiones
El alcalde Bill de Blasio declaró al presupuesto como "misión cumplida" por los $300 millones que se concederán para el programa de educación preescolar. Crédito: <copyrite>EDLP</copyrite><person>MARIELA LOMBARD< / person>
Nueva York La Legislatura estatal de Nueva York aprobó a última hora del lunes un presupuesto de $140 mil millones para el próximo año fiscal, que expandirá la educación preescolar a todo el estado y dará alivio fiscal a los negocios y propietarios de casas.
El presupuesto dejó contentos a medias a los legisladores estatales hispanos, quienes celebraban la decidida apuesta por el pre-K, pero lamentaban los recortes de impuestos que benefician a los más ricos, especialmente cuando se han dejado fuera programas de vital importancia para los inmigrantes.
“La comunidad inmigrante debería estar enfurecida porque el presupuesto recorta impuestos para intereses de los ricos cuando no podemos encontrar $20 millones para enviar a los dreamers a la universidad”, dijo el senador estatal Adriano Espaillat. “Pero los fondos para la educación preescolar son una tremenda victoria. Estudios demuestran que el pre-K es muy efectivo para ayudar a niños de familias con menos ingresos y que están aprendiendo inglés a tener éxito escolar”.
En ese sentido, el alcalde Bill de Blasio calificó el presupuesto como “misión cumplida” en una reunión ayer con reporteros, ya que los $300 millones que se le concederán a la ciudad de Nueva York para el programa de educación preescolar universal, le permitirán poner en marcha el próximo septiembre su gran promesa electoral.
Organizaciones que abogan por la transparencia del gobierno criticaron sin embargo duramente al gobernador y a los legisladores estatales por no haber hecho más para reformar el sistema de campañas electorales estatales.
Sobre la mesa estaba una propuesta para implementar un sistema de financiación pública para las campañas de los que se presenten a puestos estatales, similar al existente en las elecciones de la ciudad de Nueva York, que da prioridad a las pequeñas donaciones ciudadanas sobre las de las grandes corporaciones.
Lo único que se aprobó, sin embargo, fue un programa piloto por el que únicamente la carrera a Contralor Estatal se someterá de momento a esta medida.
“El fracaso del gobernador para que se apruebe una reforma financiera de las campañas es un grandísima derrota para el 71% de los votantes que creen que no se hace bastante para luchar contra la corrupción”, declaró Susan Lerner, directora ejecutiva de Common Cause NY. “Los legisladores permitirán a Albany seguir recaudando grandes cantidades de dinero de intereses especiales que fijan nuestra política pública”.
