Exigen reformas al sistema de emergencias 911 en NY
El tiempo promedio de llegada de una ambulancia a una escena es de nueve minutos, lo que para algunos es inaceptable
NUEVA YORK – Después de escuchar unas dramáticas grabaciones tomadas durante el incendio en un convento de Staten Island en octubre pasado, miembros del Concejo Municipal hicieron un llamado a reformar el sistema de llamadas de emergencia de la ciudad.
Las cintas revelaron que operadores del 911 llamaron hasta seis veces para clarificar la dirección del convento. El sistema electrónico usado por las operadoras no reconocía la dirección, a pesar de que la monja que llamó dio indicaciones claras de cómo llegar al lugar. Mientras la ayuda se retrasaba, el fuego provocó cinco heridos, incluyendo una monja que tuvo que saltar desde un segundo piso.
Las grabaciones, que fueron divulgadas la semana pasada, fueron presentadas durante una audiencia pública este viernes en el organismo, en la que se cuestionó fuertemente a los líderes del Departamento de Policía y el de Bomberos, quienes operan en conjunto para administrar el 911.
“El protocolo actual causa pérdida de tiempo y hace difícil el trabajo de rescatistas cuando hay vidas en peligro”, declaró la concejal Elizabeth Crowley, presidenta de la Comisión de Bomberos y Justicia Penal. “El tiempo promedio de llegada de una ambulancia es de nueve minutos, y eso es inaceptable”.
La administración del alcalde Bill de Blasio anunció la suspensión temporal de un proyecto para seguir renovando la tecnología del sistema de comunicaciones de emergencia, hasta que se investigue el origen de los problemas. Por su parte, el inspector del NYPD, Richard Napolitano, declaró que están revisando el protocolo que usan los trabajadores de emergencias.
El sistema se implementó, en 2009, con la intención de agilizar el proceso. Anteriormente, las llamadas al 911 eran respondidas por un operador del NYPD, e inmediatamente transferidas a unidades de paramédicos o bomberos en el lugar de los hechos. Actualmente, antes de transferir la llamada, el despachador es responsable de escribir todos los datos de la emergencia, incluyendo dirección, en un las computadores.
El nuevo programa, conocido como Unified Call Taker (UCT) es parte de un amplio proyecto de actualización del sistema de emergencias iniciado por el exalcalde Michael Bloomberg, en 2004, a un costo de $2,000 millones.
Las críticas no son nuevas. El Uniformed Firefighters Association y District Council 37, los sindicatos que representan los operadores de 911 se han quejado de las fallas en el nuevo sistema desde sus inicios.
A finales del año pasado, la pequeña hispana Ariel Russo, quien fue atropellada en Manhattan, murió mientras esperaba la ambulancia, que tardó nueve minutos en llegar también por fallas técnicas en el sistema.
Las llamadas del 911 son atendidas por técnicos de comunicación del NYPD en las oficinas centrales de Brooklyn.
Después de recopilar todos los datos del incidente, las llamadas son transferidas a las unidades de emergencia del Departamento de Bomberos (FDNY) y de paramédicos EMS, en cada uno de los cinco condados.
El Buró de Servicio Médico de Emergencia (EMS) es parte del FDNY.