Sólo para Samoyedo lovers

Si buscas un peludo inteligente, juguetón y sobre todo cariñoso, el Samoyedo es una buena opción.

Un Samoyedo es un perro obediente e inteligente.

Un Samoyedo es un perro obediente e inteligente. Crédito: Shutterstock

Adoptar un perro Samoyedo es garantía de tener un compañero incondicional, juguetón, inteligente y obediente… si recibe el entrenamiento y la atención adecuados. A pesar de ser una raza mediana-grande se adaptan a espacios no necesariamente amplios, siempre y cuando reciban a diario un par de paseos, largos y contundentes.

Felizmente tuve una compañera Samoyedo, Loba, que luego de subsistir en la calle, vivió en un departamento durante 10 años sin causar más destrozos de lo normal. Su carácter juguetón y sociable hace a un Samoyedo apto para convivir con otros perros, pues además su naturaleza es estar en manada para jalar trineos. Los hay que conviven incluso con otras especies, como este cachorro que juega con un hurón:

En realidad no son agresivos, a menos que se sientan amenazados, y a cambio de su largo y abundante pelaje que seguro encontrarás en toda tu ropa, el característico olor a perro es más suave en esta raza. Cuentan con una capa corta de pelo pegada a su piel y una más larga que sobresale, pues en su hábitat suelen enterrarse en la nieve. Esa doble capa de pelo les protege del frío y del ataque de pequeños juguetones como este gatito de uñas afiladas:

De mi Loba Samoyedo aprendí muchas lecciones de fidelidad, amor y compañerismo, pero si piensas adoptar un ejemplar de esta raza te daré un tip que tarde o temprano me agradecerás: cuando lo saques a pasear no olvides que su naturaleza es jalar un trineo… y con esa misma fuerza te jalará sin dudarlo ni un segundo.

También debo decirte que un Samoyedo es obediente y entiende muy bien quién manda en casa sin necesidad de que seas hostil ni muy dura con él; un poco de disciplina es suficiente para que “te pida permiso”, como esta pequeña que espera la señal de su humano para recibir un mimo:

Los Samoyedo disfrutan mucho la compañía de los humanos, así que no hay que dejarlos mucho tiempo solos para que no se depriman. Es muy aconsejable que dediques unos minutos diarios a cepillarlos: les encanta y te ahorrará malos ratos con su pelo.

Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain