Una Estrella de Quisqueya

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nueva york

En su debut en el US Open, el tenista dominicano Víctor Estrella Burgos se recuperó de un mal primer set y brilló con luz propia para ganar su primer partido en un torneo de Grand Slam al vencer en cuatro episodios al holandés Igor Sijsling con parciales de 2-6, 6-4, 6-3, 6-2.

Estrella Burgos jugó literalmente en casa, ya que la mayoría de los aficionados que nutrieron las gradas de la cancha seis del Centro Nacional de Tenis estaban ahí para gritar su nombre y hasta tratar de influenciar.

“Sí, por momentos me confundí porque (la gente) gritaba ‘fuera’ a pelotas que estaban bien y varias veces les tuvimos que llamar la atención”, dijo Estrella Burgos entre risas. “La verdad que no esperaba que tanta gente fuera a venir”.

Además de esos gritos, la tribuna se unió en más de una ocasión para cantarsu nombre, pero ese apoyo casi juega en su contra, como el mismo tenista manifestó.

“Al principio, sí sentí un poco de presión y con un primer set en el que jugué mal y estaba nervioso, pensé que los estaba defraudando porque habían venido desde allá (República Dominicana) a verme jugar”, dijo. “Pero después usé sus cantos y su apoyo para seguir adelante”.

Su mal inicio de partido le duró hasta entrado el segundo set. Caía 4-1, cuando comenzó a enderezar el rumbo al ganar su saque para el 4-2 y luego le romperle el servicio, que le había dado muchos problemas temprano en el encuentro, a Sijsling para acercarse 4-3.

Se llevó los siguientes sets y al llegar al match point, nuevamente los gritos de la afición expectante causaron confusión ya que el golpe que parecía sellar la victoria fue marcado fuera. Estrella Burgos brincó y celebró sólo para desilusionarse con la marcación.

Eso causó un poco de inquietud. Estrella Burgos perdió los dos siguientes puntos pero al final un error de Sijsling, que golpeó la pelota fuera de la cancha, le dieron el anticipado triunfo.

“Casi gané el partido dos veces”, indicó. “Me dieron más nervios de los que ya tenía. Y cuando finalmente lo gané casi lloro de tanta emoción”.

El quisqueyano, que este año se coló a los 100 primeros del ranking de la ATP, ahora espera su partido de segunda ronda del US Open ante el croata Borna Coric, jugador más joven en el torneo varonil con 17 años, un rival al que conoce.

Coric derrotó ayer al checo Lukas Rosol [29] con parciales de 6-4 6-1 6-2

“Literalmente le doblo la edad. Espero sacar provecho de mi experiencia y mi buen momento. Aunque es un muchachito al que ya he visto jugar y tiene muy buen tenis”

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