Se repite la historia para los Dodgers
Un mal inning le cuesta a Kershaw otra derrota ante San Luis y a los Dodgers ser eliminados
Clayton Kershaw #22 no pudo sacudirse la mala racha frente a San Luis en la postemporada. Crédito: Getty Images
Los Dodgers pisaron las huellas del año pasado y tomaron el mismo camino lleno de espinas, al caer vencidos por 3-2 ante los Cardenales en el Busch Stadium de San Luis, en el cuarto juego de la serie divisional.
Había que verlo y palparlo para poder creerlo. Clayton Kershaw, el mejor lanzador del planeta béisbol, se derrumbó por cuarta vez en la postemporada frente a unos pájaros rojos salvajes.
El virtual ganador de su tercer premio Cy Young en cuatro años, lució imponente en los primeros seis innings, tal como en el primer juego de la serie. Pero llegó el séptimo y con él otra catástrofe.
Kershaw apenas había permitido un hit cuando Matt Adams le cazó una curva que se le quedó en el centro y volteó la pizarra 3-2 con su mortal bombazo por el jardín derecho, cuyo estruendo se escuchó en Los Ángeles.
Un roletazo para double play de Matt Kemp y sencillo de Juan Uribe dieron la delantera 2-0 a los Dodgers en la sexta entrada. Esas dos carreras hubiesen sido suficiente para aquel Kershaw de la temporada regular, pero en los playoffs es otra historia.
El jonrón de Adams elimina por segundo año seguido a los Dodgers y deja a Kershaw con marca de 0-3 y efectividad de 9.72 en sus últimas tres aperturas de postemporada, incluyendo la del sexto y decisivo juego de la Serie de Campeonato el año pasado.
“La temporada terminó para nosotros y asumo mucha responsabilidad en ello. No tengo palabras para expresar lo mal que me siento”, dijo Kershaw en un vestidor donde se podía escuchar el vuelo de una mosca. “Un mal deja vu otra vez”, agregó.
Mientras el piloto Don Mattingly y su gente trataba de digerir otro rotundo fracaso en San Luis, los Cardenales hacían planes para el que será su noveno viaje a la Serie de Campeonato en 15 años.
“Floté por las bases”, dijo Adams. “Es el momento más grande de mi carrera”.
Fue otra decepción para los directivos de los Dodgers, que cerraron la temporada con una planilla de $256 millones de dólares, $40 millones más sobre cualquier otro equipo.
