De Nueva York para el mundo
Un fin de semana lleno de genios y vuelos increíbles
Zach LaVine hizo magia en el concurso de mates y se llevó el trofeo de campeón y los aplausos de todos. Crédito: <copyrite>GETTY IMAgES</copyrite><person>< / person>
@rafacores
Una fiesta con todos y para todos. Sólo posible en un lugar tan especial como Nueva York. Al paso del Juego de Estrellas de la NBA se sumó el bochinche de la farándula y la presencia de celebridades para poner en caliente uno de los días más fríos en dos décadas.
¿Boletos? No haga bromas. Ya no quedaban y el promedio de uno para entrar al vaticano del baloncesto esta arriba de los dos mil dólares. Y además la amenza del frío. Pero se jugó y se gozó.
Fueron, a final de cuentas, las celebridades los testigos de primera fila del espectáculo que millones de aficionados de todo del mundo siguieron gracias a 1,800 periodistas acreditados.
El interés ya no es tan sólo por ver a los astros estadounidenses, sino por robarle una declaración a las estrellas internacionales de la NBA como los hermanos españoles Pau y Marc Gasol, figuras con todas las de la ley, que caminan rodeados de periodistas.
Los rituales concursos de habilidades, triples y clavadas comenzaron a calentar el ambiente la noche del sábado en el Barclays Center de Brooklyn.
Stephen Curry, de Golden State Warriors, ganó la competencia de tiros triples batiendo en la final con 27 puntos a su compañero Klay Thompson y a Kyrie Irving (Cleveland). El que se llevó la noche fue Zach LaVine que, con apenas 19 años, salió a reclamar la corona de rey volador en el concurso de mates.
LaVine se quitó la camiseta con la que saltó a la pista y mostró debajo otra, nada más y nada menos que de Michael Jordan. El armador de Minnesota lanzó la bola al aire, la recogió y pasó por debajo de las piernas en pleno vuelo para machacar a una mano a aro pasado.
El jurado, las leyendas del baloncesto neoyorquino Julius Erving, Walt Frazier, Nate Archibald, Bernard King y Chris Mullin, le dio 50 puntos, máxima puntuación. Victor Oladipo lo retó en la final, pero LaVine ganó con facilidad
