Ocho señales de que se avecinan problemas crediticios
De manera sigilosa, los problemas crediticios pueden crecer de manera insospechada
A menudo, los problemas crediticios comienzan de manera imperceptible; sin embargo, antes de que se tornen inmanejables, hay señales de que se avecinan. Estar alerta a estas advertencias le permitirá hacer los cambios necesarios para no tener preocupaciones financieras a futuro.
Tener una tarjeta de crédito no es algo malo si la usa en forma adecuada. Sirve como puente para acceder a cosas mejores y abre un historial crediticio que ayuda a comprar bienes de mayor envergadura, por ejemplo, un inmueble o un vehículo.
Desafortunadamente, la posibilidad de “gastar primero y pagar después” es un terreno resbaladizo que desencadena serios problemas crediticios. Puede sucederle a personas de cualquier edad, nivel de ingreso y posición social.
Muchas de estas señales son evidentes para el consumidor atento, pero en ocasiones la vida es tan ajetreada que las ignoramos para evaluarlas más adelante. El único problema es que ese momento no llega nunca.
Cuanto antes admita que tiene problemas crediticios, más rápido podrá solucionarlos. Si niega el problema, lo único que ganará son cuentas en gestión de cobranzas, embargos, desalojos y quiebra.
Esté atento a estas ocho señales que indican que usted va en camino a tener un problema:
1. Usted no se ajusta a un presupuesto. Si no elabora un presupuesto, sus gastos se le pueden ir de las manos fácilmente.
2. Un banco le niega un préstamo. Es posible que el acreedor considere que usted ya tiene un nivel de deuda demasiado elevado, aunque su calificación crediticia oficial no sea mala, al menos por ahora.
3. Usted efectúa pagos fuera de término en forma regular. Se le aplican penalidades costosas, que incrementan el importe de sus facturas y el riesgo de incurrir en deudas.
4. Usted solicita préstamos para llegar a fin de mes. Si recurre a estos préstamos en efectivo a corto plazo con altas tasas de interés, en breve, se verá inmerso en deudas.
5. Usted compra artículos de primera necesidad con tarjeta de crédito. Si compra artículos de primera necesidad con tarjeta de crédito, quiere decir que está gastando más de lo que gana y que no podrá cancelar la totalidad del saldo pendiente a fin de mes.
6. Su tasa de porcentaje anual, es decir, los intereses que paga por año, incrementa. Una tasa de porcentaje anual más elevada implica que el prestamista considera que usted corre mayor riesgo de tener problemas de deudas.
7. A usted no le alcanza para más que el pago mínimo obligatorio. Es una clara advertencia de que está gastando más de lo que gana con su tarjeta de crédito.
8. Usted no tiene suficientes ahorros para hacer frente a gastos de emergencia. Si usa su tarjeta de crédito en situaciones de emergencia, corre el riesgo de acumular deudas siderales.
Si reconoce estas señales, debe plantearse hacer ciertos cambios, incluso al punto de modificar su estilo de vida. Evalúe cada una de sus compras y pregúntese si realmente se trata de una necesidad genuina. Use sus tarjetas de crédito única y exclusivamente para emergencias y pague la mayoría de sus gastos en efectivo. Comprométase a ahorrar un determinado porcentaje de sus ingresos para constituir un fondo de emergencia.
Si tiene temor a efectuar los cambios necesarios, es posible que necesite de la ayuda de un asesor de deuda. Con perseverancia y ayuda para aliviar sus deudas, puede aprender a administrarse para evitar incurrir en deudas y reencauzar sus finanzas.