Inversiones inteligentes para pagar menos impuestos
Los inversionistas a largo plazo suelen tener algún tratamiento impositivo preferencial
A nadie le gusta pagar impuestos. Si bien son una de las dos cosas ineludibles de la vida, usted quiere hacer todo lo que esté a su alcance para reducir esta carga. Hay dos formas de lograr este objetivo: una de ellas es invirtiendo a largo plazo en fondos mutuos que se especializan en clases de activos generales, y la otra es utilizando fondos mutuos con gestión impositiva.
Los inversionistas deben pagar dos tipos de impuestos. Por un lado, el impuesto sobre la renta ordinario sobre los intereses generados por sus títulos de deuda. Además, si vende sus inversiones dentro del año de la fecha de adquisición y obtiene una ganancia como resultado de la venta, esa ganancia también estará gravada a la tasa ordinaria del impuesto.
No obstante, si obtiene una ganancia por la venta de un título que conservó durante más de un año, esa ganancia está gravada por la tasa del impuesto sobre las ganancias de capital a largo plazo, la cual es más baja. Para el caso de la mayoría de los contribuyentes, esa tasa no supera el 15%.
Como puede observar por el tratamiento impositivo preferencial que reciben los inversionistas que conservan sus títulos durante más de un año, invertir a largo plazo es más conveniente.
Somos fuertes defensores de las inversiones en clases de activos, en las que usted invierte en fondos que le dan a exposición a grandes clases de acciones similares, por ejemplo, acciones de grandes empresas estadounidenses o de pequeñas empresas de mercados desarrollados internacionales.
Al invertir de esta forma, evita comprar y vender títulos porque conserva sus fondos que invierten en una amplia gama de inversiones. El único momento en el que debe vender partes de una clase de activo es al reequilibrar su cartera para alinearla a la asignación de activos que se propuso como objetivo.
Para la asignación de renta fija, los inversionistas pueden usar títulos de deuda municipales y así obtener intereses exentos del impuesto sobre la renta federal. En la mayoría de los estados, la renta generada por los títulos de deuda de inversionistas residentes de esos estados está exenta de impuestos estatales.
Pero, ¿hay formas de reducir la carga impositiva? Sí, las hay. Si bien usamos fondos mutuos que invierten en clases de activos para generar posibles ahorros impositivos, podemos usar los denominados fondos mutuos con gestión impositiva, que apuntan a minimizar los impuestos en el proceso de inversión.
Los gestores de estos fondos procuran minimizar la incidencia del impuesto evitando las ganancias a corto plazo. Algunas de las técnicas aplicadas incluyen las denominadas tax lot accounting (que consiste en llevar un registro del precio de compra y del precio de venta de cada título para obtener el mejor tratamiento impositivo) y tax loss harvesting (que consiste en vender un título bajo la par a los efectos de compensar las ganancias imponibles).
Los fondos mutuos con gestión impositiva que empleamos también aplican modelos cuantitativos para evaluar el costo de llevar a cabo una transacción. El propósito de todas estas tácticas es reducir la base imponible de los inversionistas.
El aspecto que nos resulta interesante de este tipo de fondo mutuo es que puede adaptarse a las constantes reformas del código impositivo. Los fondos pueden modificar sus procedimientos operativos a fin de reflejar las nuevas normas que se emiten.
Para aquellos inversionistas comprendidos en las categorías impositivas más altas, pagar menos impuestos es un beneficio importante. La próxima vez que presente sus declaraciones de impuestos, preste atención al importe que representan las ganancias a largo plazo en su cartera sujeta a impuestos frente al importe que representan las ganancias a corto plazo. Analice inteligentemente las consecuencias impositivas de sus inversiones y podrá transformar una cartera buena en una cartera excepcional.