Pianos, arte y esperanza en Nueva York

Stephanie Martínez, Directora de Arte para Jóvenes, ‘Sing for Hope’

Desde las 6 de la mañana, un grupo de hombres se dedica a una tarea que exige fuerza y maña. No es un piano solo el que deben trasladar , si no 50 y estos Yamaha, Whitney, -algunos de cola, otros no- son pianos muy especiales que han sido ‘intervenidos’ artísticamente y convertidos en piezas únicas.
Stephanie Martínez trabaja en Sing For Hope desde el 2010 y fue parte vital de esta iniciativa que durante dos semanas llevará los pianos a espacios públicos en los cinco condados para que todos puedan disfrutarlos.
Caminando con cuidado por el enorme sótano ubicado sobre la calle 38 y la 8va avenida, se abre paso entre estas vibrantes obras de arte que vio mutar y transformarse desde el inicio. “La mayoría de los pianos han sido diseñados por artistas plásticos muy reconocidos pero en cuatro de ellos trabajé junto a niños de distintas escuelas de Nueva York y con los chicos del Coro Juvenil de Sing for Hope que dirijo”.

“Cantamos de Todo”

El coro, integrado por unos 30 estudiantes, se reúne bajo la tutela de Stephanie todos los martes y jueves en la sede de la organización en Midtown. Para ella, formada en el mundo de la música como cantante clásica, trabajar con estos jóvenes es gratificante. “Veo semanalmente como estos muchachos, algunos con problemas para relacionarse o con cuestiones complejas en sus casas, superan dificultades a través del arte. Yo tengo raíces cubanas y me encanta la salsa pero aquí le decimos que sí a todo”. Esa apertura de repertorio quedó plasmada en el piano que Stephanie y sus coristas diseñaron repleto de frases de distintas canciones y brillantes notas musicales. “Este se va para Times Square”, apunta mientras un fornido operario lo carga.

PIANO UNO

De espacios públicos a sus nuevos hogares

Hasta el 21 de junio, los pianos estarán apostados en Grand Army Plaza, en el ‘Unisphere’ de Flushing Meadows, en Astor Place y el Central Park y otros puntos de NYC. La meta es, como dice el eslogan de la organización, que éste sea ‘Arte para Todos’; que todos puedan admirar las bellas pinturas y hacer música con estos pianos que han sido revisados y afinados especialmente para la exhibición. Un equipo de voluntarios los salvaguardará de las inclemencias del tiempo. “Los llamamos ‘Piano Buddies’ explica Stephanie y están equipados con cobertores de hule en caso de lluvias”. Así, llegarán óptimos a su destino final: Hospitales, centros comunitarios y escuelas donde con sus colores, sonidos y arte seguirán brindando esperanza.

PIANO DOS

Más información en singforhope.org
@singforhope

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