El lunes sin falta dejo la dieta

Estudios científicos revelan que las personas ‘gorditas’ son tan o más sanas que las delgadas

La dieta es un asunto de familia. Desde que los niños son pequeños, padres y cuidadores les inculcan hábitos sanos de nutrición. Así como les enseñan a hablar y a caminar, también los motivan a elegir alimentos nutritivos. Cuando creen que el número de la balanza es “demasiado” alto, enseguida tratan de restringir las calorías y los ponen “a dieta”.

En la actualidad, nadie puede cuestionar las consecuencias negativas de una dieta basada en comida chatarra, o con un alto contenido de azúcar y grasa. ¿Pero hasta qué punto es necesario obsesionar a los niños desde pequeños con alcanzar un número genérico y universal en la balanza.
Los últimos estudios científicos demuestran que el mito de que es necesario adelgazar para estar más sano, no es necesariamente cierto.

Mi IMC dice que me ponga a dieta

En consultorios y clínicas médicas es común ver en las paredes posters con las cifras recomendadas de índices de masa corporal, (IMC o BMI, por sus siglas en inglés). Este número, que se obtiene a través de una simple fórmula matemática, es el porcentaje de grasa corporal en relación a la estatura y el peso de la persona.
El índice “normal” y deseado de IMC oscila entre 18.5 y 24.9. Aquellas personas con un índice menor a 18.5 son consideradas demasiado delgadas, mientras que aquellas con un BMI de más de 25 tienen sobrepeso. Las personas cuyo BMI es mayor a 30 son consideradas obesas.
Hasta hace poco, el concepto general era que las personas con sobrepeso, esto es con un IMC mayor a 24.9, debían adelgazar para estar sanas. Y sin embargo, las investigaciones científicas más recientes demuestran lo contrario. Una de ellas fue la realizada por Katherine Flegal y asociados del Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (www.cdc.gov). Según la investigación, las personas con sobrepeso y muchas de aquellas consideradas obesas tienen menor riesgo de mortalidad y viven más años que aquellas consideradas delgadas.
Paul Campos, Profesor de la Universidad de Colorado, (lawweb.colorado.edu) coincidió con los hallazgos del estudio. Según el autor del controversial libro El mito de la obesidad, una persona con sobrepeso, medianamente activa puede ser más sana que una persona delgada, pero sedentaria.
Campos opinó que la solución no es tratar de hacer adelgazar al paciente, porque generalmente la persona vuelve a ganar el peso perdido, lo que presenta aún más riesgos para la salud. El experto aseguró que la salud cardiovascular de la persona es más decisivo que su IMC. Básicamente, que lo importante es concentrarse en la salud y no en el número de la balanza.
Los resultados de los estudios de largo alcance, que siguen a sus encuestados durante más de 18 meses, coinciden en que el 97% de las personas que hacen dieta, ganan el peso perdido al cabo de tres años. En realidad, es el efecto de las dietas yo-yo (que baja, pero vuelve a subir) lo que causa enfermedades cardiacas, resistencia de insulina y alta presión.
El académico opinó que médicos y profesionales de la salud, junto a la industria para perder peso, conocen esta información, pero que a pesar de ello, exageran y obsesionan innecesariamente a la sociedad con el número de la balanza. Entre los motivos de tal exageración, Campos mencionó razones económicas y culturales.

¿Quiénes ganan cuando perdemos peso?

Los motivos culturales están basados en un modelo arbitrario de belleza impuesto por la sociedad que presiona a niñas, jóvenes y mujeres adultas a alcanzar un ideal irrealista que en la mayoría de los casos requiere la ayuda extra de dietas y cirugías.
Los motivos económicos son fomentados por industrias multimillonarias que se benefician con la venta de productos y servicios para perder peso y son fomentados por muchos de los medios.
Según información de Marketdata Enterprises Inc (marketdataenterprisesinc.com), la industria para perder peso, que incluye compañías farmacéuticas y de alimentos, programas dietéticos, suplementos alimenticios y libros de dietas, es un negocio de $59.8 mil millones de dólares.
En los últimos dos años, la industria de la dieta ha visto una disminución en sus ganancias, debido a la tendencia del público a concentrarse más en la salud, que en la pérdida de peso. En 2014, las ganancias de la industria disminuyeron un 1.1% como resultado de la caída de ventas de bebidas dietéticas.

En esta nota

Autoestima Dieta Familia Hijos Mujer Salud
Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain