Retumba el discurso anti-inmigrante de Trump en Nueva Jersey

Un simpatizante del republicano coloca carteles que preocupan a la comunidad hispana en Morristown

NUEVA JERSEY   –  La retórica anti-inmigrante de Donald Trump, no sólo ha ayudado al precandidato republicano a lograr gran apoyo entre los sectores más conservadores, sino que también está impulsado a algunos individuos a lanzar ataques directos contra los indocumentados, provocando gran preocupación en la comunidad hispana.

Eso es lo que está ocurriendo en el vecindario de Morristown, en Nueva Jersey, donde residen miles de colombianos, entre otros grupos de inmigrantes. Desde hace tres días, un residente anglosajón, Gregg Bruen, tapizó el frente de su casa con carteles ofensivos en contra de la comunidad latina.

El hombre, 52 años y que trabaja como carpintero, aseguró que está cansado del aumento en los impuestos y culpa por esto directamente a los inmigrantes que han llegado a Morristown.

“No es justo que yo tenga que pagar impuestos para mantener a la gente ilegal que viene a vivir de este país”, dijo Bruen mientras señalaba uno de los carteles, donde tiene escrito que “en Morristown viven 35,000 trabajadores ilegales y 23,759 son de Montenegro, Colombia”. Pese a que estas cifras distan mucho de la realidad.

Bruen  colocó ocho grandes carteles en las afueras de su casa ubicada en la avenida Spreedwell, los cuales realizó con madera, los pintó de blanco y escribió en rojo y verde. En uno de los letreros exhorta a votar por Trump: “Es el único candidato que está realmente consciente de lo que causan los indocumentados en este país”.

En algunos de los carteles acusa a funcionarios de la ciudad de ignorar sus quejas por el hacinamiento de las viviendas, asegurando que en las casas vecinas residen entre 30 a 40 personas y cuando ha llamado al ayuntamiento para hacer la denuncia supuestamente ha sido acosado por las autoridades.

“La última vez que denuncie el hacinamiento vino un inspector de la ciudad y en represalia me hizo cambiar el revestimiento de aluminio de mi casa y las ventanas”, afirmó el carpintero.

CARTELES POR GREGG BRUEN 2

CARTELES POR GREGG BRUEN 2

(Fotos: Víctor Matos/Especial para El Diario)

Preocupación entre hispanos

Los carteles han caído muy mal dentro de los miembros de la comunidad hispana que representa el 34% de los 18,411 habitantes de esta ciudad. Se estima que alrededor de 5,000 personas provienen del pueblo de Montenegro, en Colombia.

Una de las que tiene preocupación por los carteles es Nancy Arias. La montenegrina dijo, sin embargo, que sobre todo se siente muy ofendida: “Yo trabajo, soy ciudadana americana, este señor no tiene derecho a insultarnos porque somos gente que se gana la vida trabajando honradamente”.

La hondureña Sandy Morales, que reside desde hace 3 años a solo dos casas de Bruen, contó en tono resignado que ya está acostumbrada al acoso del hombre al que calificó de “loco”. “Se la pasa llamando a la Ciudad para denunciarnos por cualquier cosa. Los inspectores así como vienen se van porque no encuentran nada ilegal”, indicó.

La situación no ha caído tampoco bien a las autoridades. El alcalde Tim Dougherty lamentó la actitud de Bruen. “Es doloroso que alguien recurra a este tipo de cosas. Son una vergüenza, son hirientes. Pero no puedo evitarlo. Las personas tienen derecho a la libre expresión”.

PROTESTA DEL SENOR GREGG BRUEN

Un pasado anti-inmigrante

Esta actitud anti-inmigrante ha hecho a la ciudad revivir casos similares en el pasado. En 2007, el entonces alcalde Donald Cresitello, trató sin éxito de implementar el programa federal 287(g) que habilita a la Policía a pedir documentos y preguntar por el estatus migratorio de una persona. Antes que eso, en 2001, el alcalde John DeLaney, promovió una ordenanza multando con $500 o 3 meses de cárcel a los jornaleros que se pararan en la calle Morris.

Diana Mejia, activista de Viento del Espíritu, una organización de ayuda a inmigrantes, afirmó que está ocurriendo con Bruen es un claro reflejo del ambiente anti-inmigrante, racista y discriminatorio que están promoviendo algunos de los candidatos presidenciales con sus retóricas.

“Una persona del común, como es este señor, al escuchar a un candidato que insulta a un grupo específico, se siente también con derecho a poner letreros ofensivos en su casa”.

Pero los conservadores se defienden. José Arango, presidente del Partido Republicano en el condado Hudson, resaltó que su partido “no es anti-inmigrante”, calificando la actitud de Bruen como de “ignorante”.

“Por desgracia todo lo que hace Donald Trump es un show. Habla mucho pero no da una solución real para la seguridad nacional y no reconoce a las personas decentes que vienen a trabajar a este país”, subrayó.

Habitantes de Morristown

  • Población 18,400
  • Latinos 34% (6,277)

En esta nota

Inmigración

Suscribite al boletín de New York

Recibe gratis las noticias más importantes de Nueva York diariamente en tu email

Este sitio está protegido por reCAPTCHA y Google Política de privacidad y Se aplican las Condiciones de servicio.

¡Muchas gracias!

Más sobre este tema
Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain