“Hay una cultura de brutalidad en contra de los jóvenes” en cárceles angelinas
Investigan la golpiza de dos menores en cárceles juveniles de Los Ángeles –pero no es la primera vez que ocurre
De manera unánime, los cinco miembros de la Junta de Supervisores del Condado de Los Ángeles solicitaron un informe detallado sobre el número total de incidentes de abuso contra menores de edad retenidos en los centros de detención y campamentos juveniles.
Dos casos de supuesto abuso fueron denunciados en el blog WitnessLA de la editora Celeste Fremon.
Ambos fueron confirmados por Kerri Webb, portavoz del Departamento de Libertad Condicional, y solamente uno por parte de Ricardo Santiago, de la oficina de la Procuradora de Distrito del Condado.
“El Departamento de Libertad Condicional nos presentó un caso, en junio, alegando que un joven alojado en Sylmar fue asaltado el 24 de abril”, dijo Santiago a La Opinión. “El caso está bajo revisión por parte de fiscales asignados a nuestra División de Integridad en el Sistema de Justicia. No tenemos ninguna informacion sobre alegaciones en la facilidad juvenil Central”.
Los responsables del Departamento de Libertad Condicional tienen 45 días para presentar el informe a la Junta de Supervisores, respecto a presuntos abusos ocurridos en los pasillos y campamentos bajo su vigilancia.
“Es problemático lo que sucede”, dijo Al Naipo, portavoz del supervisor Mark Ridley-Thomas, a La Opinión. “Él quiere ir a la raíz de los problemas”.
Los presuntos incidentes de abuso
La preocupación de los funcionarios surgió como consecuencia de un reporte del pasado 24 de abril, en el que se menciona a cuatro agentes que presuntamente propinaron una golpiza a un joven de 17 años de edad. Un supervisor fue testigo.
Los hechos ocurridos en el centro de detención juvenil Barry J. Nordhoff de Sylmar están bajo investigación. La instalación alberga temporalmente a jóvenes por dos razones: antes que llegue su fecha para presentarse ante un tribunal o después de ser sentenciados por la corte, en espera de la transición para ser atendidos fuera del lugar.
Aunque el video obtenido por WitnessLA no tiene sonido, en los cuatro minutos de duración se observa el ataque a un adolescente no combativo.
Un mes después, un empleado del condado fue testigo del maltrato a un niño de 14 años de edad, a quien habían sometido en el piso. El menor reportó que el Oficial de Servicios de Detención le aplicó un tirón por la parte trasera de su sudadera, haciendo que el niño sintiera que estaba siendo asfixiado.
Según el relato de los testigos, el adolescente respondió varias veces a la agresión utilizando la palabra ofensiva “ ¡Ni…r!” contra el agente.
“Hay una cultura de brutalidad en contra de los jóvenes”, dijo en su blog Celeste Fremon, editora de WitnessLA. “Y ellos están muy molestos”.
Agentes removidos de sus puestos
Kerry Webb, portavoz del Departamento de Libertad Condicional, confirmó los dos incidentes e indicó que los agentes involucrados en ambos casos fueron removidos administrativamente de sus puestos, con goce de salario.
Si bien no pudo emitir una opinión personal respecto a probables nuevas reformas al sistema de justicia juvenil, precisó que “por mandato de la Junta de Supervisores”, en 45 días el departamento emitiría un reporte.
“Ellos son los que mandan [la Junta de Supervisores]”, dijo Webb. “Es cuestión de ellos decidir [si habría reformas”.
El sistema más grande de la nación
El condado de Los Ángeles opera el mayor sistema de justicia juvenil del país. Incluye tres centros de detención juvenil y 13 campos de libertad condicional.
Según datos de los Jefes de Agencias de Libertad Condicional de California, entre enero de 2002 y marzo de 2015, de un total de 3,477 adolescentes encarcelados en 2002, en Los Ángeles la cifra se ha reducido en 63.10%, a 1,283, hasta febrero de 2015.
No obstante, esta cifra representa el 24.05% de todos los adolescentes encarcelados en California: 5,334.
Dichos jóvenes encarcelados en estas instalaciones se consideran bajo la protección de los tribunales y bajo el cuidado del Departamento de Libertad Condicional y el condado. El Condado es responsable de la seguridad, la salud y el bienestar de estos jóvenes mientras están bajo custodia.
Teniendo en cuenta esta responsabilidad, Ridley-Thomas indicó que es esencial que el Condado proteja adecuadamente a estos jóvenes. Sin embargo, dicho Departamento, ha luchado durante años para cumplir con este mandato.
Cero tolerancia para abusos
Calvin Remington, jefe interino del Departamento de Libertad Condicional del Condado, indicó que cualquier incidente de maltrato a los adolescentes es tomado muy en serio.
“Tenemos a nuestro personal en un concepto muy alto”, dijo Remington, en una declaración emitida a WitnessLA. “Tenemos [una política de] cero tolerancia de maltrato a los menores en nuestro cuidado”.
Al cierre de esta nota, el funcionario no respondió a las preguntas de La Opinión.
En este sentido, Kerri Webb expuso que “todos los agentes [asignados] en instalaciones del Departamento de Libertad Condicional están entrenados bajo mandatos federales y de California. Y sí, hay numerosas políticas, procesos, estrategias y directrices federales y estatales que se centran en la seguridad de los jóvenes y los oficiales en nuestras instalaciones”.
Políticas y protocolos: “un sistema roto”
El supervisor Ridley-Thomas ha solicitado un informe que abarque cualquier tipo de incidente por los últimos tres años, así como una revisión de las políticas y protocolos.
Basado en las recientes acusaciones de abuso, dijo que eso “es algo que no podemos tolerar y no vamos a pasar por alto”.
A partir de 2006 – 2015, el Departamento de Justicia investigó y supervisó las instalaciones de justicia de menores del Condado en respuesta a una serie de supuestos abusos.
En 2010, se presentó una demanda por el fracaso de proporcionar educación a los jóvenes en los campamentos y dio lugar a un acuerdo con el Departamento de Justicia para una solución de varios años.
El funcionario indicó que se han logrado progresos para adoptar modelos positivos, centrados en la juventud, incluyendo el nuevo modelo el Campus Kilpatrick de Los Ángeles, donde se ha prohibido la incomunicación a los adolescentes.
“El sistema de justicia juvenil está roto”, expresó la abogada de derechos civiles, Connie Rice. “Deberíamos tener un sistema que no trate a todos los jóvenes con problemas como criminales y que los fiscales no les levanten cargos como si fueran adultos”.
