Plan integral de la Asamblea sobre viviendas aborda diversas necesidades

La Asamblea del Estado de Nueva York es llamada a menudo la “casa del pueblo” – y con razón. Todos los días trabajamos para asegurar que las familias de Nueva York tengan acceso a las cosas que necesitan más: un salario digno, una educación de calidad y vivienda que ofrezca seguridad y estabilidad.

La vivienda es fundamental para nuestra salud y nuestras vidas, y para muchos neoyorquinos, representa su mayor gasto mensual. El número de neoyorquinos que usan la mayoría de sus ingresos para el alquiler sigue aumentando: en el 2012, se informó que más de 3 millones de hogares en nuestro estado pagaron un 30%  más de su ingreso familiar para pagar la renta. Peor aún, más de la mitad de las familias utilizan más del 50%  de sus ingresos en el pago de sus hogares. Es evidente que existe una crisis de vivienda en el estado.

Como parte del presupuesto estatal aprobado, la Asamblea defendió un plan de vivienda de $2 mil millones para cubrir las diversas necesidades de los neoyorquinos en todo el estado. Estos fondos están sujetos a un memorando de entendimiento entre la Asamblea, el Senado y el Gobernador que definirá cómo se utilizará ese dinero. Para la mayoría de la Asamblea, las prioridades no pueden ser más claras. Nuestro plan invertirá en las reparaciones capitales más necesarias de vivienda pública, en la revitalización de las propiedades de Mitchell-Lama, la ampliación de las oportunidades de vivienda para personas mayores y poblaciones vulnerables, así como otras iniciativas y programas.

Creando nuevas viviendas asequibles

Un número inaceptable de neoyorquinos está gastando gran parte de sus ingresos en el pago de sus viviendas, lo cual hace difícil, si no imposible pagar por alimentos, utilidades y otros gastos necesarios. Sin la creación de nuevas unidades de vivienda asequible, los residentes se enfrentan a mayores costos en la vivienda, que pueden provocar el desplazamiento de los que viven en estas zonas y un aumento en el número de familias que no pueden adquirir un hogar. La creación y preservación de residencias asequibles ayudará a resolver la crisis y la epidemia de la falta de vivienda y asegurará que todos los neoyorquinos tengan acceso a hogares seguros y de calidad. Además de la importancia de lograr este objetivo a largo plazo es importante la preservación de las residencias existentes, ya sean públicas o privadas.

Mejorando la vivienda pública existente

El estado de Nueva York tiene una larga tradición de proveer vivienda pública a los neoyorquinos que más lo necesitan. Actualmente, aproximadamente el 8% de las unidades de alquiler de la ciudad de Nueva York son administradas por la Autoridad de Vivienda de Ciudad de Nueva York (NYCHA) y casi medio millón de residentes en la ciudad viven en estas unidades. Muchas de estas propiedades han envejecido y necesitan desesperadamente de reparaciones, y el plan de la Asamblea asigna los fondos para hacer estas imprescindibles mejoras.

Las propiedades de Mitchell-Lama, que proporcionan viviendas a familias de ingresos moderados, enfrentan retos únicos. Pese a su alta demanda, estas propiedades están disminuyendo porque el estatuto actual les permite abandonar el programa después de 20 años. Como un incentivo para evitar la pérdida de estas valiosas viviendas, el Programa de Preservación y Rehabilitación de Viviendas Mitchell-Lama fue creado para ofrecer financiación flexible y de bajo costo para reducir la deuda de servicio a los dueños de estas viviendas y para liberar recursos para hacer las mejoras capitales y renovaciones de edificios. A su vez, los propietarios están obligados a mantener las rentas asequibles durante 40 años. El plan de la Asamblea proporciona fondos adicionales para este programa. También pedimos que fueran invertidos varios millones de dólares en programas de vivienda pública en todo el estado porque cada neoyorquino merece un hogar en el que se sienta orgulloso de vivir.

Abordando la falta de vivienda de las comunidades más vulnerables

Las poblaciones más vulnerables de Nueva York también necesitan fondos. Las inversiones en vivienda de apoyo son la forma más efectiva para eliminar la falta de hogar de los que más la necesitan, como los individuos que sufren de enfermedades mentales, traumas o abusos, por el uso de drogas u otras enfermedades crónicas como el VIH/Sida. Numerosos estudios sobre los costos y beneficios de vivienda social han concluido lo mismo: dejar a estas personas vulnerables y a sus familias sin hogar es extremadamente costoso para los contribuyentes, mientras que proporcionarles apoyo con sus viviendas provee más ahorros a todos los que pagan impuestos. Invertir en viviendas de apoyo es una solución de sentido común que no sólo es responsable fiscalmente, pero es una inversión que ofrece una oportunidad a las vidas de estas personas. La mayoría de la Asamblea apoya la colocación de fondos para la construcción y operación de al menos 6,000 nuevas unidades de vivienda de apoyo en todo el estado y asegura el financiamiento de los primeros años para iniciar la creación de estas unidades. Nuestro plan incluye $30 millones para crear viviendas de apoyo para las personas sin hogar en el estado de Nueva York.

La Asamblea también reconoce que los padres de niños con discapacidades merecen tener la tranquilidad de que sus seres queridos sean apoyados y atendidos. El plan de Asamblea apoya una inversión significativa en unidades de vivienda asequible para estas personas. Además, aunque hemos tomado una serie de acciones exitosas para ayudar a las personas que viven con VIH/Sida, la mayoría de la Asamblea propone la otorgación adicional de fondos para servicios y apoyo para ayudar a que estos reciban la ayuda que necesitan para mantenerse estables en sus viviendas. Es inadmisible e irresponsable descuidar las necesidades de vivienda de quienes más lo necesitan.

Financiación de nuevos programas de vivienda para ancianos

Las personas mayores en el estado de Nueva York también requieren de opciones de vivienda segura y asequible. Actualmente hay 2.6 millones de personas mayores que viven en el estado de Nueva York y los estudios sugieren que el número podría aumentar en un 40% en el año 2040. Aunque muchas personas mayores prefieren seguir viviendo donde se encuentran, y la Asamblea apoya estos esfuerzos, para muchos de ellos esto no es una opción. Al seguir aumentando los alquileres, las personas mayores que viven con un ingreso fijo luchan por encontrar una vivienda que se adapte a sus necesidades particulares. Además, muchos ancianos son víctimas de individuos sin escrúpulos y sufren la injusticia de ser expulsados de sus hogares mediante hostigamiento del casero y el desprecio flagrante de las leyes que regulan el alquiler. Nuestro plan financiará un nuevo programa de viviendas y ayudará a evitar que las personas mayores tengan que tomar decisiones difíciles sobre su subsistencia.

Estoy orgulloso de que todos – la Asamblea, el Senado y el Gobernador – reconocieron la necesidad de invertir en viviendas y acordaron un compromiso sin precedentes de $2 mil millones en el presupuesto. Es hora de ponernos serios sobre cómo se distribuirá este dinero. Millones de neoyorquinos que están luchando por mantenerse a flote cuentan con nosotros. Insto a mis colegas en el Senado y al Gobernador a unirse a nosotros para hacer una verdadera diferencia en las vida de la gente que servimos.

-Carl E. Heastie es el presidente de la Asamblea del Estado de Nueva York

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