Mi otro trabajo
El 29% de los empleados tiene una ocupación extra independientemente de sus ingresos
Por tener más ingresos, por aprender algo nuevo, por tener nuevas experiencias, por gusto, por mejorar el resumé. Hay muchas razones y muchos trabajadores con un segundo empleo independientemente del salario que tengan con el principal. El 34% de las personas que ganan $50,000 al año tiene más de un trabajo pero uno de cada cinco que se embolsa $75,000 y el 12% de los que reciben cheques que suman $100,000 al año también.
Según ha tabulado CareerBuilder, el 29% de los trabajadores tienen un trabajo extra, sobre todo si son mileniales. En el caso de las personas de bajos ingresos, que además, tienen que lidiar con horarios que permiten poca anticipación, es algo que está dando fuerza a un movimiento de activistas y sindicatos a niveles local y estatal para que las horas de trabajo se hagan públicas con el tiempo suficiente como para poder organizar un segundo empleo, una vida familiar o estudiantil.
La mayor parte de los que tienen otro trabajo son las personas que trabajan en servicios como bares y restaurantes, comercio al por menor y transporte. Así es fácil que crezca la llamada economía gig a través de plataformas que ofrecen facilidades a quienes quieren ser taxistas (Uber), asistentes de compra (Instacart) o ayudante a domicilio (Task Rabbit).
Los trabajadores de sectores como la salud, las ventas e incluso las tecnologías de la información, servicios financieros y manufacturas, también suelen optar por un trabajo complementario. ¿Y qué hacen? Hay aprendices de creadores de tatuajes, pero son los menos. Normalmente, los trabajos que se hacen fuera del horario del empleo princpial son como el de encuestador, cuidador de niños, consultor, escritor, cuidadora de hogar, bloguero, mesero, fotógrafo o videógrafo, diseñador de web o tutor de estudiantes.
Normalmente, quienes hacen este tipo de trabajos no lo hacen por pasión y de hecho les gusta más el principal que el secundario. Con todo, muchas personas tratan de encontrar en otras ocupaciones la posibilidad de conectar mejor con otro tipo de empleo. Según CareerBuilder, el 80% de los trabajadores dicen que no están en la ocupación de sus sueños. Es un objetivo difícil. Por distintas razones, el 71% no querría que su trabajo complementario fuera el más importante.
Hay empresas que tienen cláusulas de incompatibilidad de trabajos e impiden si no todos, algunos empleos mientras se trabaja en ciertas organizaciones. Con ello se evitan conflictos de intereses, sobre todo.
Pero para los empleadores, el hecho de que una persona tenga dos empleos no es necesariamente malo. Al contrario, explica la jefa de Recursos Humanos de CareerBuilder, RoseMary Haefner, “puede hacer al trabajador más atractivo”. “Cuando se solicita un empleo, otros trabajadores pueden tener más experiencia en un campo determinado pero si se añaden otro tipo de capacitaciones que se consigan con otra ocupación, se puede ganar ventaja competitiva”.
¿Qué se valora?
- Ganar en capacitación fuera de las horas de trabajo, lo que permite ampliar la experiencia.
- Los empleadores buscan personas innovadoras, miembros de un equipo proactivo y que tengan iniciativa
- El aumento de la creatividad.