Mi experiencia con el Google Pixel como usuario de iPhone

Aquí está el veredicto final. ¿Cambiaría de teléfono o seguiría fiel a la manzanita?

Tuve la experiencia de probar por una semana el smartphone Pixel, con el que Google aspira a competir con los iPhones de Apple y los Galaxy de Samsung.

Lo primero que debo advertir es que he sido usuario de iPhone desde que aparecieron en el mercado. Tuve iPhone 3, 4s y en la actualidad tengo un 6+.  También he sido fiel a los computadores de Apple. Encuentro que sus productos son fáciles de operar para alguien que no es un ingeniero de sistemas. Sin embargo, a nivel de software, soy usuario de Google, desde el navegador Chrome hasta la plataforma de correo electrónico Gmail. También encuentro conveniente usar Google Translate y los Google Maps.

Empecemos por el aspecto físico. Son teléfonos muy similares en tamaño, aunque mi iPhone es un poco más delgado y largo.

El Pixel es de la izquierda. Juan Mesa
El Pixel es de la izquierda. Juan Mesa

El Pixel tienen la pantalla de reconocimiento de huella digital en el respaldo del teléfono. Esto hizo que usar el dedo índice para tal función en lugar del pulgar que usé en el iPhone.

El Pixel tiene el reconocimiento dactilar en el respaldo.
El Pixel tiene el reconocimiento dactilar en el respaldo.

Tener la pantalla sin botones es un gran punto a favor del Pixel. Le da un aspecto más limpio pero entonces, ¿por qué dejar casi que una pulgada en blanco? Pudo ser una pantalla más larga.

Ahora pasemos en lo operativo. Lo que más me interesa en un teléfono es la cámara, y el Pixel debuta con una de buena calidad tanto en video como en imagen fija.

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La función de ojo de pez (gran angular) es lo que más me impactó de la cámara. Una herramienta útil y divertida. Las instrucción es precisa con puntos de referencia que aparecen en la pantalla y son fáciles de seguir.

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Con la Panorama no tuve tanto éxito. Debo ir a Google o YouTube para revisar cómo se utiliza.

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Otro elemento destacado es que para cambiar de cámara frontal a trasera sólo hay que girar el teléfono, sin necesidad de tocar la pantalla.

Si tienes una cuenta de Gmail, la configuración e integración del teléfono es muy sencilla. Todas las herramientas de Google que utilizas quedan activas con el primer registro. Esto ayuda desde desde el recibo de email hasta para subir videos a YouTube.

La descarga y organización de apps no es tan diferente a como se hace en un iPhone. El acceso a ellas es muy directo. Comprender el nuevo sistema es algo que puedes hacer con un día de operación.

Creo que Duo, el app de video-llamadas tendrá la misma acogida de Facetime cuando las personas lo usen. No entiendo por qué no apareció antes en los sistemas Android.

¿Cambiaré de teléfono?

El veredicto final es que el Pixel es un gran aparato. No me explotó y eso hay que destacarlo (lo siento amantes del Galaxy). Pude hacer la mayoría de las cosas que hago con mi iPhone. Me animaría a cambiarlo aunque por tener otros productos de Apple en casa encuentro conveniente seguir fiel a la manzanita. Pero si alguien me pide una recomendación sobre el Pixel, le puedo decir que va a tener un gran smartphone a su disposición.

El precio inicial del Pixel es $649 con 32GB.

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