Comunidades latinas se asfixian en aire tóxico y la EPA de Pruitt lo empeoraría
Una de las mayores amenazas para la salud y el bienestar de la niñez latina podría convertirse esta semana en líder de la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés), en donde buscaría eliminar y debilitar protecciones básicas para mantener nuestro aire limpio y nuestra agua pura.
Scott Pruitt, candidato de Trump para dirigir una de las agencias de protección más importantes para nuestras familias y nuestro planeta en vías de calentamiento, es un negador del cambio climático y rechaza protecciones fundamentales para la salud. Como líder de la EPA el actual fiscal general de Oklahoma sin duda expondría a nuestros niños a un gran riesgo médico. Los hijos de familias latinas son más propensos a contraer problemas médicos severos relacionados con la contaminación como el asma. Alrededor de 8.5% de niños latinos tienen asma, así como el doble de probabilidades de ser hospitalizados en comparación a niños de familias blancas. Muchos padres latinos conocen la expresión en el rostro de sus hijos —y su propia desesperación— cuando sufren un ataque de asma. Este problema solo empeorará si el Senado confirma a Pruitt como líder de la agencia que él mismo ha combatido durante años como fiscal en Oklahoma.
Pruitt ha demandado a la EPA más de 14 veces, atacando entre otras cosas la Ley de Agua Limpia que protege el agua para una de cada tres personas; y la Ley de Mercurio y Aire Tóxico, que reduce la contaminación tóxica por mercurio y evita 11,000 muertes prematuras al año. Incluso en pequeñas cantidades, el mercurio afecta al cerebro y al desarrollo de nuestros hijos desde el útero, con consecuencias de por vida. El país no votó a favor de revertir leyes esenciales para el medio ambiente, ni para destruir candados legales que reducen la contaminación tóxica de automóviles, infraestructura para gas y petróleo, centrales eléctricas, u otras fuentes. Sin embargo, todo indica que Pruitt, famoso por proteger a la industria de combustibles fósiles y otros contaminantes de reglas ambientales, pondrá en marcha esta terrible plataforma si es aprobado por el Senado. No es casualidad que durante su audiencia en el Senado, Pruitt redobló esfuerzos para defender a contaminadores industriales y las ganancias privadas.
Asimismo, dado que Pruitt no entiende que el calentamiento global nos está afectando, y que es ocasionado por actividad humana, es improbable que él actúe en contra del nocivo impacto que el cambio climático tiene en nuestra salud. Ante todo, es improbable que él quiera entender que sus acciones dañarán el bienestar de generaciones futuras.
Las comunidades latinas sin duda serán de las más afectadas si el Senado ratifica a Pruitt, considerando que más de 1.8 millones de latinos viven en áreas donde el aire tóxico emitido por la producción de gas y petróleo es tan excesivo que los riesgos de cáncer exceden lo que la EPA llama “niveles de preocupación”.
De hecho, los latinos tienen un 165% más de probabilidades de vivir en condados con niveles insalubres de contaminación por material particulado. Dicha contaminación puede ser microscópica, pero a su vez puede penetrar nuestros pulmones, ser absorbida por el torrente sanguíneo y dañar el sistema respiratorio y cardiovascular. El año pasado hicimos equipo con el Grupo de Trabajo de Aire Limpio y la Liga de Ciudadanos Latinoamericanos Unidos para analizar datos federales enfocados a los impactos en comunidades latinas relacionados a instalaciones de producción, procesamiento y transporte de petróleo y gas natural.
Encontramos que los contaminadores industriales están ubicados abrumadoramente en vecindarios latinos, donde el ozono (smog) —un causante de asma— viola los estándares federales. Necesitamos un administrador de la EPA que entienda el peso de nuestra huella ecológica y el daño de la contaminación sobre las personas. Pruitt no es esta persona y si llega administrar la EPA nuestros hijos sufrirán el peso de sus decisiones. Los estudios muestran que 153,000 niños latinos sufren ataques de asma cuando los niveles de ozono están en su peor momento, lo que resulta en más de 112,000 días escolares perdidos, visitas al hospital e incluso muerte.
Cientos de organizaciones como la Asociación Nacional Médica Hispana, así como cerca de un millón de personas, han firmado y mandado cartas a los senadores que se oponen a la ratificación de Pruitt para un puesto que no tiene la capacidad de ejercer. Trump puede ya ser presidente, pero esta elección de gabinete no ha llegado a su fin. Todavía tenemos oportunidad de exhortar a nuestros senadores a rechazar a Pruitt y decirle al presidente que nos ofrezca un candidato con un verdadero historial de protección al medio ambiente que esté comprometido en salvaguarda la salud de las comunidades más afectadas.
-La Dra. Elena Ríos es presidenta y directora ejecutiva de la Asociación Nacional Médica Hispana, NHMA