Comité clave del Senado aprueba polémico plan de recorte de impuestos
Los republicanos se acercan a una importante victoria legislativa para Trump
WASHINGTON? Bajo presiones de la Casa Blanca, el Comité de Presupuestos del Senado aprobó este martes, sobre líneas partidistas, un polémico plan de recortes de impuestos por $1,5 billones en una década, en un paso clave a su eventual votación en el pleno esta misma semana.
El plan fue aprobado poco después de un almuerzo que realizó el presidente Donald Trump en el Capitolio con los principales líderes republicanos del Senado, en medio de fuertes pugnas con los demócratas que se oponen a la medida porque abultará el déficit y perjudicará a largo plazo a millones de pobres.
Mañana mismo, el Senado, bajo control republicano, prevé aprobar una regla para iniciar el debate de enmiendas al plan, que fue elaborado sin la participación de los demócratas. El objetivo es someterlo a un voto definitivo para el próximo viernes.
Pero los republicanos, que numeran 52 en el Senado, están recurriendo a reglas parlamentarias para no tener que depender del apoyo de los 46 demócratas y dos independientes que votan con ellos, y no pueden permitirse más de dos disensiones entre sus filas.
Aún así, necesitan al menos 50 votos para aprobar el plan, que reforma el código tributario y reduce los impuestos para varios tramos salariales, aunque beneficiando principalmente a los ricos y corporaciones, según varios análisis independientes.
Si la medida no supera los 50 votos, de un total de 100, entonces el vicepresidente, Mike Pence, en su calidad como presidente del Senado, tendría que acudir al Capitolio a romper el empate.
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Al parecer, Trump logró persuadir a varios senadores republicanos que se oponían al plan por el impacto que tendría en sus estados, entre éstos Susan Collins, Ron Johnson, y Bob Corker.
Tras el encuentro con los republicanos, Trump reconoció que la versión final reflejará “muchos ajustes”, pero repitió su errónea idea de que, al final, será el plan de recortes de impuestos “más grande en la historia” del país.
Entre otros elementos, la versión del Senado reduce la tasa tributaria de las corporaciones del 35% al 20% a partir de 2019, y reduce de forma temporal los impuestos para individuos y familias hasta el año 2025. También elimina por completo los subsidios del gobierno federal para ayudar a familias de ingresos bajos o modestos en la compra de seguros dentro de “Obamacare”, en un esfuerzo por desmantelar la reforma sanitaria de 2010.
Los republicanos aún no han explicado cómo financiarán el plan sin abultar más el déficit, pero la mayoría de expertos vaticina que lo más probable es que tengan que recortar miles de millones de dólares a programas de ayuda social y que, a largo plazo, la mayoría de familias de clase media verá un aumento de impuestos.
La medida que salga del Senado tendrá que ser armonizada con la que aprobó la Cámara de Representantes, para resolver las diferencias entre ambas versiones y producir un solo texto legislativo. Sin embargo, la Cámara se reserva la opción de aprobar en vez la versión del Senado, para agilizar los trámites.
Si el Congreso aprueba el plan, sería una importante victoria legislativa para Trump que, salvo la confirmación del juez conservador Neil Gorsuch en el Tribunal Supremo, no ha tenido otros logros legislativos de consideración.