Abuela vive hasta los 99 años con casi todos los órganos en el lugar equivocado

Rose Marie Bentley vivió 99 años sin saber que tenía una condición anatómica muy rara

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Crédito: rawpixel-Pixabay

Cuando Rose Marie Bentley falleció a los 99 años de edad a fines de 2017, la abuela de Oregon, que disfrutaba de ir a la iglesia y trabajar en la tienda local de alimentos que poseía y operaba con su esposo, parecía haber vivido una vida normal. Al menos en el exterior.

En el interior, era una historia completamente diferente.

Antes de su muerte por causas naturales el 12 de octubre de 2017, la madre de cinco hijos de Molalla, decidió donar su cuerpo a la ciencia. Pero cuando los estudiantes de medicina de la Oregon Health and Science University de Portland lo abrieron para estudiar, quedaron pasmados.

Su corazón se encontraba en el lugar correcto, pero su hígado y otros órganos abdominales, que normalmente se encuentran en el lado derecho del cuerpo, estaban en el lado izquierdo, informó USA Today. Los órganos internos de Bentley estaban completamente invertidos, como un espejo dentro del cuerpo.

“Mi madre pensaría que esto era genial”, dijo la hija de Bentley, Louise Allee.

Además de sus cinco hijos, Bentley dejó a 56 nietos: 14 nietos, 31 bisnietos y 11 bisnietos, según su obituario.

Su muerte es precedida por la de su esposo James. Juntos, dirigieron la tienda de alimentos Bentley que compraron en 1959. También trabajó en su iglesia local y fue líder de una fogata durante unos 15 años. cuando ella era una mujer joven.

“Cuando observamos los órganos de su cavidad abdominal, que tienen los órganos del tracto digestivo, se transponen completamente de derecha a izquierda”, dijo a USA Today Cameron Walker, profesora asistente de anatomía en la Universidad de Salud y Ciencia de Oregon.

“Nunca había visto esto antes y los estudiantes estaban tan fascinados”.

¿La razón? Bentley sufrió una condición rara llamada situs inversus con levocardia, y los científicos creen que es la persona más anciana en tener la condición.

Según un estudio publicado en el Singapore Medical Journal, aproximadamente 1 de cada 22,000 bebés nacen con la afección, pero Walker explicó que solo uno de cada 50 millones vive hasta la edad adulta, debido a graves problemas cardíacos que a menudo surgen en los pacientes.

Al parecer, Bentley ni siquiera se enteró de su condición en vida, a pesar de que le extrajeron tres órganos. Solo el cirujano que eliminó su apéndice comentó sobre su colocación inusual en sus notas, aunque los familiares dicen que ella habría apreciado la atención.


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