Gas volverá a edifico de Hell’s Kitchen en enero tras un año sin el servicio

El 4 de junio pasado, unos 500 inquilinos que viven en el edificio Polyclinic Apartments, localizado en el 345 W de la calle 50, en el vecindario de Hell’s Kitchen, en Manhattan, cumplieron un año sin gas. Y en medio de las quejas de los residentes sobre la lentitud como se han dado las labores para resolver el problema, representantes del edificio explicaron por qué se dio la tardanza y anunciaron una buena noticia: se espera que el servicio se restablezca en enero próximo.

Idan Sims, asesor de la firma Standard Companies, dueña del inmueble, que cuenta con 150 apartamentos y que fue convertido en residencial en 1930, aseguró que desde que se presentó el corte del servicio de gas, el casero ha sido diligente para tratar de resolver el problema, pero afirmó que la Ciudad se tardó varios meses en otorgar los permisos para iniciar las obras de reparación y que por lo antiguo del edifico hubo pruebas que no pasaron.

“El trabajo ya está en marcha y a tiempo para eliminar y reemplazar todas las tuberías de gas de todos los apartamentos, y empezó hace como tres semanas, tan pronto como nos dieron los permisos, que fueron demorados por el Departamento de Edificios (DOB)”, aseguró el consultor, quien explicó que las obras irán hasta diciembre y que deberán hacerse por cada línea de manera vertical, lo que será dispendioso por la longitud del inmueble de más de 12 pisos.

Sims advirtió que aunque se repare unas torres, el servicio de gas no podrá ser reestablecido por zonas sino que deberá regresar por completo cuando hayan terminado todos los trabajos y el Departamento de Edificios haga las pruebas de seguridad necesarias. Asimismo, manifestó que ha sido tal el compromiso del casero, que en el proyecto no solo se invertirá un total de $1.2 millones sino que además se han hecho reducciones en las rentas de los inquilinos para tratar de compensar de alguna manera el impacto que han sufrido.

“Ha habido más de $63,000 en créditos a inquilinos y se estima que lleguen a $146,000. Además, hasta ahora se han invertido $480,000, incluyendo nuevos planos, trabajos del arquitecto, materiales y se estima que haya un costo futuro similar y hamos entregado un nuevo parque de juegos y estufitas para los residentes, sin ningún costo para ellos”, concluyó el vocero de la firma que compró el edificio hace 18 meses.

Uno de los residentes, del piso 8, quien prefirió no mencionar su nombre, se mostró optimista con las obras y dijo que los actuales dueños no tuvieron la culpa de los daños, pues el edificio venía con problemas desde antes. “Ellos compraron un muerto, y están tratando de hacer lo mejor que pueden”, dijo el abuelo.