La recesión del COVID-19 es devastadora para la comunidad latina

Aquejados de condiciones sociales preexistentes esta comunidad sufre una fuerte erosión económica y una alta tasa de mortandad de jóvenes

NEW YORK, NEW YORK - JULY 29: President & CEO of Food Bank For New York City Leslie Gordon distributes fixed fans during Food Bank For New York City distribution event at Lincoln Center on July 29, 2020 in New York City. In addition to unemployment and homelessness, millions of Americans face food insecurity as a result of the economic downturn caused by the coronavirus pandemic (Photo by Michael Loccisano/Getty Images for Food Bank For New York City)

NEW YORK, NEW YORK - JULY 29: President & CEO of Food Bank For New York City Leslie Gordon distributes fixed fans during Food Bank For New York City distribution event at Lincoln Center on July 29, 2020 in New York City. In addition to unemployment and homelessness, millions of Americans face food insecurity as a result of the economic downturn caused by the coronavirus pandemic (Photo by Michael Loccisano/Getty Images for Food Bank For New York City) Crédito: Michael Loccisano | Getty Images

El daño global que el coronavirus ha hecho y sigue haciendo no ha afectado a todos por igual y en EEUU, un país muy fragmentado económicamente y con grandes desigualdades sociales, la pandemia, lejos de ser una tragedia que trata a todos por igual, ha seguido las líneas trazadas por las grietas sociales y caído como un mazo sobre los que ya partían de la base de la vulnerabilidad.

En concreto la comunidad latina es víctima de unos efectos que se califican como “devastadores” por parte de los economistas del Economic Policy Institute (EPI).

Este centro de estudios da cuenta detallada de los efectos económicos, de salud y las condiciones sociales de los latinos durante la pandemia para concluir que la recesión va a ser muy dura para estos trabajadores y sus familias.

El primer motivo por el que esto ocurre es porque la mano de obra latina se concentra en algunas de las industrias que más han sufrido y siguen sufriendo por lo que sufren más la enfermedad y la pérdida de empleo, sobre todo en el caso de las mujeres. “Además, los reciente rebrotes han estado concentrados en estados como Arizona, California, Texas y Florida, donde hay un mayor porcentaje de población latina”.

Valerie Wilson, una de las economistas que ha participado en la elaboración de este informe que se publica hoy jueves, explicaba a este periódico que los latinos no solo han sufrido mayores complicaciones económicas sino que además su tasa de desempleo ha superado durante marzo y abril la de los negros que tradicionalmente es más elevada. Una de cada cinco mujeres latinas llegó a estar desempleada en abril un mes en el que la tasa de desempleo de los hombres fue del 16.7%.

Actualmente estas tasas se han rebajado, conforme se ha ido abriendo la actividad económica, pero el daño está hecho y el desempleo aún afecta en julio a casi el 13% de la población (en abril la tasa era del 18.9%).

Además del desempleo, los trabajadores de esta comunidad ya tenían bajos salarios antes de la pandemia y menos patrimonio además de peores beneficios laborales como el acceso al seguro de salud.

Enfrentarse a un periodo de largo desempleo con recursos muy contados añade inseguridad a este colectivo.  “Este nivel bajo de seguridad económica pre-pandemia ha sido animado por una serie de factores, incluido un régimen inmigratorio racista que ha estado dirigido a desamparar a los latinos en el lugar de trabajo”, explican los economistas de este centro de estudios, de corte progresista, en un informe en el que se revela que el 45.9% de estos trabajadores tienen acceso a licencia por enfermedad cuando el 66.6% de los blancos la tienen.

Una proporción que está cerca de llegar a uno de cada cuatro trabajadores latinos, carece de seguro de enfermedad. En el caso de los blancos este grave problema que se convierte en gravísimo en una pandemia afecta al 7.5%.

La crisis no ha sido tan demoledora con los que pueden trabajar desde sus hogares pero las cifras del EPI muestran que esta situación solo protegía el trabajo del 23.4% de los latinos el pasado mes de mayo.

La situación de esta comunidad podría mejorar si se trabajara para acabar con las fuertes desigualdades en el país y hubiera una mayor movilidad social, es decir, políticas que eliminen las barreras a la mejora de la posición económica, explica Wilson. En este sentido menciona “políticas que dejen de ayudar a los que más tienen y otras racistas o xenófobas que excluyen a demografías enteras y tienen un efecto muy duradero”.

Wilson dice que es realista, que se ha hecho hasta ahora poco progreso y que las diferencias “han sido persistentes durante años”. No obstante cree que ya hay un lenguaje sobre el cambio de una situación que es “insostenible en este punto y es muy costosa para el país”.

Alta tasa de mortandad joven

Uno de los datos que más ha llamado la atención de los economistas que han trabajado sobre los datos referentes a los latinos es que la pandemia ha sido muy agresiva con los latinos pese a que son, mayoritariamente, una población muy joven.

Los datos que manejan apuntan a que las tasas de mortandad son similares entre los blancos y los latinos, 39 y 35 muertos por cada 100,000 respectivamente. “Pero este dato que es una media no deja ver las diferencias entre grupos de edad. Entre la población blanca han fallecido más ancianos, los mayores de 75 años. Los menores de 35 años tienen un riesgo mucho menor a no ser que sean latinos. En este caso tiene entre seis y ocho veces más posibilidades de no sobrevivir a la enfermedad.

En el caso de los latinos entre 35 y 44 años tienen una posibilidad nueve veces mayor de morir de COVID-19 que un blanco de este grupo.

Y no solo por las condiciones de salud preexistentes (como la diabetes y el asma) que les hacen mucho más vulnerables sino también por la situación de carecer de seguro y el hecho de que los hogares de estas familias son los más multigeneracionales y densamente ocupados por lo que es más fácil que haya una mayor exposición y transmisión de la enfermedad.

Por lo que se refiere a la salud también ha habido decisiones políticas que han perjudicado seriamente a los latinos como por ejemplo el mandato de no cerrar las empresas procesadoras de carne cuando el virus afectaba a cientos de trabajadores que operaban con escasas o ninguna medida de seguridad. Buena parte de los trabajadores de esta industria son latinos.

En el informe se señala que al menos ocho millones de indocumentados latinos están fuera de la red de social. Esto es una realidad para muchas mujeres que hacen limpiezas, cuidan de ancianos y niños además de muchos jornaleros. Todos los que contribuyeron con sus impuestos con un ITIN y que se han quedado fuera de las ayudas específicas para esta crisis. “El Congreso podría ampliar los programas para que les cubrieran muy fácilmente”, explica Valerie Wilson que recuerda que si millones de personas que son consumidores no pueden cubrir sus necesidades básicas “la economía se perjudica”.

La propuesta HEROES Act aprobada por el partido demócrata en la Cámara de Representantes si expande ayudas a los inmigrantes indocumentados. El HEALS Act que propone la mayoría republicana en el Senado, no.

Cifras

$15,377 es el valor de activos líquidos (que se pueden usar para consumir) de las familias latinas como media. El valor medio de los activos de los blancos  es $49,529.

19.1% de las latinas son cabezas de familia, solteras con hijos.

$51,450 anual son los ingresos medios de un hogar latino frente a los $70,642 de uno blanco

17.6% era la tasa de pobreza de los latinos en EEUU en 2018.

$0.64 es lo que gana una trabajadora latina por cada dólar que gana un hombre blanco. Los latinos ganan 11 centavos más.

En esta nota

ayudas económicas Covid Economía Latinos pandemia
Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain