Descubre las maravillas de la dieta australiana para perder peso, de manera saludable y sin darte cuenta
La dieta australiana promueve una filosofía de vida saludable. Se basa en priorizar el consumo de alimentos integrales y de origen vegetal, grasas saludables y cero ultraprocesados
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En los últimos años han salido a la luz todo tipo de tendencias y pautas alimenticias, que se relacionan con sus beneficios para perder peso y ganar salud. Sin lugar a dudas gozar de un peso saludable es uno de los temas más de moda, pero más allá de eso se trata de una de las mejores medidas en la prevención de enfermedades y se relaciona directamente con la longevidad.
Con base en lo anterior cada día escuchamos más sobre las dietas más recomendadas por sus cualidades terapéuticas y es muy normal escuchar sobre los beneficios que ofrecen los estilos de alimentación según la geografía. Por supuesto recientemente todos hablan sobre los inmensos beneficios de la dieta mediterránea, que es considerada uno de los estilos de alimentación más medicinales y saludables; no en vano fue nombrada la mejor dieta del 2019. Complementario a ello han salido a la luz otras recomendaciones de gran valor como es el caso de la dieta australiana.
Es importante mencionar que según la región se presentan ajustes en las pirámides nutricionales y con base en ello diversos especialistas en medicina y nutrición, se han dado a la tarea de analizar diversos esquemas a profundidad. Una de las comparaciones más recientes y de gran relevancia, sobre todo entre la pirámide española y la australiana.
Todo surgió gracias al análisis realizado por Álvaro Vargas reconocido autor de libros de nutrición y coach de alimentación práctica y saludable, quien se dedico a desmenuzar las principales diferencias entre la dieta española y la australiana, utilizando como base las pirámides nutricionales de cada cultura. El resultado fue contundente y encontró que la dieta australiana resulta mucho más coherente y saludable.
Lo cierto es que la sociedad australiana es reconocida por su filosofía de vida saludable y hoy en día vale la pena reconocerles esta valiosa mentalidad que se refleja en la organización de su pirámide nutricional. Lo más relevante es que su alimentación se basa en el consumo de verduras y fruta, de hecho se señala que deben basarse en el 50% de la alimentación diaria y tiene todo el sentido ya que estos grupos de alimentos son la mejor fuente de nutrientes esenciales: vitaminas, minerales, fibra y antioxidantes.
Según Álvaro Vargas este es el punto en el cual la pirámide española empieza a resultar mucho menos saludable, ya que en su base además del consumo de frutas y verduras, contiene pasta, cereales y harinas, inclusive el año pasado las harinas refinadas aparecían como sugerencia. Si bien son alimentos que se caracterizan por su aporte en fibra, carbohidratos y vitaminas, no son el tipo de alimentos que deberían de situarse en la base de la pirámide.
Sobre las bondades de la dieta australiana:
La base: frutas y verduras, en todas formas y colores
Si bien todas las pirámides nutricionales integran un adecuado consumo en frutas y verduras, lo que hace más relevante el esquema de la dieta australiana radica en su explícita recomendación sobre basar el 50% de la alimentación en el consumo de frutas y verduras, de temporada y frescas. Es una de las mejores medidas para aumentar el consumo de productos vegetales, obtener todos los nutrientes esenciales, fibra y evitar el exceso de calorías y grasas saturadas. A la vez es la mejor alternativa para mejorar el proceso digestivo e intestinal.
Contra el consumo de alimentos procesados:
La dieta australiana ha llamado mucho la atención en los últimos meses por promover un estilo de vida saludable, que se relaciona directamente con el consumo de alimentos de calidad, de origen vegetal y 100% naturales. Entre los principales valores de su pirámide nutricional se destaca por evitar la promoción en el consumo de alimentos ultraprocesados, productos industriales que se relacionan con graves consecuencias en la salud y la aparición de enfermedades crónicas que se derivan de su alto contenido en azúcares, conservadores y grasas trans. Mientras que la pirámide española integra el consumo de dulces y bollería industrial, la versión australiana suple este eslabón por el consumo de grasas saludables: aceite de oliva extra virgen, como principal fuente de grasa y considerar el consumo de productos llenos de grasas buenas como las aceitunas, los pescados, el aguacate y los frutos secos.
Prioriza el consumo de proteínas de origen vegetal:
Es bien sabido que las proteínas son un macronutriente esencial en toda alimentación saludable, lo que sucede es que hemos estado demasiado acostumbrados a obtenerlas a través del consumo de alimentos de origen animal, sobre todo con mucho énfasis en la dieta española. Sin embargo la pirámide australiana tiene la genialidad de promover el consumo de fuentes de proteína de origen vegetal, a través de grupos de alimentos como las legumbres y semillas. Lo interesante es que únicamente sugiere priorizarlos y optar por el consumo ocasional de carne, pescados, mariscos, huevo y productos lácteos.
Mucha agua
Las recomendaciones con respecto a las bebidas son contundentes, el país oceánico únicamente promueve el consumo de agua. Mientras que en España también se recomienda la ingesta de bebidas fermentadas, integrando el aviso oportuno sobre el consumo moderado y únicamente en mayores de edad. Lo cierto es que para la dieta australiana, uno de los aspectos más importantes radica en asegurar la ingesta de 2 litros de agua natural al día.
