Biden confirma a Janet Yellen como nominada para liderar el Tesoro
El presidente electo compone un equipo económico preocupado por las fuertes desigualdades económicas
Janet Yellen recomendó que los beneficios del desempleo se basen en los salarios recibidos antes de la pandemia. Crédito: Alex Wong | Getty Images
Confirmado. Janet Yellen es la persona que Joe Biden propondrá como secretaria del Tesoro al Senado. Pendiente de la votación de esta polarizada cámara, Yellen se convertirá en la primera mujer en ocupar este cargo.
Yellen será la figura más importante de un equipo económico dominado por mujeres, personas de diversos orígenes y perfiles técnicos que muestran una apuesta por la solución a las desigualdades sociales que llevan décadas consolidándose en el país. Su primera misión será sacar al país de la crisis económica de la COVID-19, una recesión que puede ser más larga que la de 2008 y más profunda.
La que también fue la primera presidenta de la Reserva Federal y del Consejo de Asesores Económicos, explicaba en su cuenta de Twitter que que el país tiene por delante retos importantes en estos momentos y para recuperarse ha de restaurarse el “sueño americano”. Este sueño, que tiene distintas definiciones por más que unifique al país detrás de él, es para Yellen “una sociedad en la que cada persona pueda llegar a su potencial y soñar en algo incluso mejor para sus hijos”, según explicaba en un tuit en el que se comprometía a trabajar por reconstruir ese dueño como Secretaria del Tesoro.
We face great challenges as a country right now. To recover, we must restore the American dream—a society where each person can rise to their potential and dream even bigger for their children.
— Secretary Janet Yellen (@SecYellen) November 30, 2020
As Treasury Secretary, I will work every day towards rebuilding that dream for all.
El sueño hace tiempo que disfruta una parte menor de la población ya que la movilidad social, la mejora económica, hace tiempo que se ha puesto cuesta arriba para un país con muchas desigualdades económicas. La crisis además, las ha disparado.
Yellen ha abierto su cuenta de Twitter este mismo mes y solo sigue a tres cuentas más, las de sus jefes, el presidente electo y la vicepresidenta electa, Kamala Harris, además de la del equipo de transición. Ella ya suma más de 33.400 seguidores.
Wally Adeyeo, un experto en macroeconomía y protección del consumidor será secretario adjunto del Tesoro
El presidente electo, quien se definió como “a Union man” (un sindicalista), también anunció a otros miembros clave del equipo económico. Otra mujer, Neera Tanden, será la directora de la Oficina de Administración y Presupuesto (OMB en sus siglas en inglés).
Su nombramiento puede tener más dificultades para avanzar en el Senado. Tanden es la directora ejecutiva del Center for American Progress un instituto de estudios de tendencias progresistas que no goza de las simpatías de muchos de los senadores que tienen que votar por su confirmación.
Si consigue la confirmación también sería la primera mujer de color y de raíces surasiáticas en ocupar la dirección del OMB.
Cecilia Rouse, una economista afroamericana especializada en el mercado de trabajo será nominada para la presidencia del Consejo de Asesores Económicos.
Jared Bernstein, que ya dirigió el equipo económico de Biden cuando fue vicepresidente en la Administración de Barack Obama, formará parte de este Consejo junto con Heather Boushey, economista enfocada en la desigualdad económica y presidenta, principal oficial ejecutiva y cofundadora del Centro para el Crecimiento Equitativo en Washington.
La llegada de las vacunas va a permitir que a lo largo de 2021 se empiece a ver la luz al final del túnel pero en ese túnel muchas personas y empresas están quedándose atrás financieramente. Hay filas interminables en los bancos de comida, meses de renta sin pagar tanto en domicilios como en negocios y el sistema del seguro de desempleo que con el CARES Act está cubriendo excepcionalmente a millones de personas desaparecerá el 26 de diciembre.
Se calcula que casi 13 millones de familias se queden sin esta ayuda mínima y no hay en el horizonte un estímulo que pueda aportar algo de vigor a una economía que no puede avanzar sin demanda privada. Y esta se está viniendo abajo para un buen porcentaje de la población, especialmente los que menos recursos tienen.
