Biden enfrenta polémica por reapertura de centros de detención de niños migrantes, aunque no están en jaulas

El Gobierno indica que los menores reciben atención adecuada bajo lineamientos por la pandemia de COVID-19

Las carpas para menores desataron polémica durante la Administración Trump.

Las carpas para menores desataron polémica durante la Administración Trump.  Crédito: Joe Raedle | Getty Images

El gobierno del presidente Joe Biden enfrenta críticas por la reapertura de los centros de retención en Texas, a donde está procesando a menores inmigrantes que cruzan solos la frontera.

“Esto no está bien, nunca ha estado bien, nunca estará bien – no importa la administración ni el partido”, dijo la representante Alexandria Ocasio Cortez (Nueva York), quien exige el cierre absoluto de esos espacios.

La Administración Biden confirmó que esos espacios están abiertos, pero aclaró que a los niños no se les encierra en jaulas, como ocurrió en el gobierno del presidente Donald Trump.

“Primero, la política de esta administración, como todos saben… no es expulsar a los niños no acompañados que llegan a la frontera”, indicó la portavoz Jen Psaki. “Y el proceso, cómo funciona, es que el Control de Aduanas y Fronteras continúe transfiriendo a los niños no acompañados a la Oficina de Reasentamiento de Refugiados del HHS. Eso puede llevar un par de días. Solo quiero dar este contexto, ya que la gente necesita entender el proceso”.

Agregó que todas las dependencias, incluidas las migratorias, deben obedecer los protocolos contra el COVID-19.

“Debido a los protocolos COVID-19, al igual que los requisitos de distanciamiento social, la capacidad en los refugios existentes de la Oficina de Reasentamiento de Refugiados se ha reducido significativamente, porque, por supuesto, no se puede tener un niño en cada cama”, indicó. “Es necesario que haya espacio, y cumplimos con ese espacio para proteger a los niños que viven en esas instalaciones durante un corto periodo”.

Psaki enfatizó que el protocoló permite mantener a los niños seguros y recibir la atención que requieren, previo a ser enviados al proceso del HHS para contactar a familiares o patrocinadores.

Ante la insistencia de reporteros en conferencia de prensa, Psaki dijo que la diferencia con la Administración Trump es que los niños no están enjaulados.

“No se trata de niños enjaulados”, expresó.  “Esta es una instalación que se abrió y que seguirá los mismos estándares que otras instalaciones del HHS. No es una réplica. Ciertamente no. (No es) nuestra intención de replicar las políticas de inmigración de la administración pasada”.

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