Abren primer Centro de Prevención de Sobredosis en la ciudad de Nueva York

La crisis de opioides se convirtió en la otra pandemia mortal a la que la ciudad de Nueva York tuvo que hacer frente durante el 2020, cuando más de 2,000 personas murieron por una sobredosis de drogas.

Ahora, la Gran Manzana, ha dado un paso para abordar el grave problema de las adicciones y frenar las muertes por opioides creando el primer Centro de Prevención de Sobredosis (OPC), cuya apertura fue anunciada este martes por el alcalde Bill de Blasio y el Departamento de Salud.

Los OPC son lugares seguros donde las personas que consumen drogas pueden acceder a la atención clínica y a otros servicios y que, según un estudio del Departamento de Salud, podrían salvar hasta 130 vidas anualmente. Son una extensión de los servicios de reducción de daños existentes y se ubicarán junto con proveedores de servicios de jeringas previamente establecidos.

“Los centros de prevención de sobredosis son una forma segura y eficaz de abordar la crisis de opioides”, afirmó De Blasio. “Me enorgullece mostrar a las ciudades de este país que, después de décadas de fracaso, es posible adoptar un enfoque más inteligente”.

Por su parte, el comisionado de Salud Dr. Dave A. Chokshi comparó la epidemia nacional de sobredosis con un “incendio de cinco alarmas” en la salud pública, indicando que había que abordar esta crisis al mismo tiempo que la lucha contra el COVID.

“Darle a la gente un espacio seguro y de apoyo salvará vidas y traerá gente de las calles, mejorando la vida de todos los involucrados. Los centros de prevención de sobredosis son una parte clave de una reducción de daños más amplia”, indicó el comisionado.

Funcionarios electos estuvieron de acuerdo en que estos centros pueden cambiar el rumbo de la lucha contra la crisis de los opioides, y dijeron que la Ciudad de Nueva York está lista para liderar el camino.

“Hemos perdido demasiado para seguir confiando en el mismo libreto. Es hora de tomar medidas audaces para ayudar a nuestros vecinos más vulnerables y las comunidades a las que llaman hogar”, dijo la vicealcaldesa de Salud y Servicios Humanos Melanie Hartzog.

El concejal Mark Levine, quien es el presidente del comité de Salud del Concejo, aplaudió que la ciudad haya tomado estas medidas históricas contra la creciente crisis de muertes por opioides, con la apertura de los primeros centros de prevención de sobredosis del país, recordando que se ha demostrado que esta estrategia salva vidas y se necesita desesperadamente en un momento en que las muertes están aumentando rápidamente.

Récord de muerte por sobredosis

Los datos provisionales del primer trimestre de 2021 muestran que 596 muertes ocurrieron en la ciudad de Nueva York entre enero y marzo de este año. Esto representa el mayor número de muertes por sobredosis en un solo trimestre desde que comenzaron los informes en el año 2000.

En Nueva York, según el resumen de datos Epi 2020, los opioides estuvieron involucrados en el 85% de las muertes por sobredosis de ese año, siendo el fentanilo la sustancia más común involucrada en dichos decesos.

Mientras los negros tuvieron la tasa más alta de muerte por sobredosis, 38.2 por 100,000 residentes, la de los latinos aumentó del 2019 a 2020 de 27.1 a 33.6 por cada 100,000 residentes.

El Bronx fue el condado más castigado por esta crisis, seguido por Staten Island. En 2020, la tasa de muerte por sobredosis entre los residentes del sur del Bronx fue de 68.7 por cada 100,000 habitantes.

Esta no es la primera iniciativa que la Administración De Blasio toma para ponerle un freno a la crisis.
A principios de este año, se anunciaron una serie de medidas para abordarla, que incluían una campaña de sensibilización sobre el fentanilo y el aumento del riesgo de sobredosis, centrada en los vecindarios con las tasas de sobredosis más altas; la expansión de los programas de servicio de jeringas (SSP), el centro de atención, el alcance y las horas de limpieza de la basura de las jeringas para incluir las noches de los días de semana y los días de fin de semana.

También se amplió el acceso al tratamiento a través de la buprenorfina –que se usa para tratar la dependencia de opioides– para las personas que se alojan en los centros de acogida del SSP y los refugios del Departamento de Servicios para Personas sin Hogar (DHS).

El centro estará ubicado en un sitio que ahora se utiliza para el intercambio de agujas, localizado en la calle 126 E, en Manhattan y será operado por una organización sin fines de lucro.

“Estos centros serán una herramienta eficaz para prevenir muertes por sobredosis, detener la propagación de enfermedades y brindar un camino hacia la recuperación. También ayudarán a abordar las preocupaciones válidas que tienen algunos neoyorquinos con respecto al aumento de la presencia del uso de sustancias en nuestras calles y su impacto en nuestras comunidades”, subrayó el senador estatal Gustavo Rivera, presidente del comité de Salud de ese estamento legislativo.

“Este es solo un primer paso. Espero trabajar con el alcalde para abrir centros de prevención de sobredosis en las áreas con las muertes por sobredosis más altas, incluido El Bronx, y con la gobernadora para autorizarlos en todo el estado de Nueva York”, dijo Rivera.