Los peligros de vivir en NYC

Nada bien pinta la situación del alcalde Eric Adams por la falta de éxito en la recuperación de la seguridad y la tranquilidad de los neoyorquinos, que cada día sufren el acoso de los delincuentes, con crímenes que hacen temer viajar en el subway, recorrer las calles o vivir en los complejos residenciales de la Gran Manzana.

El mandatario se comprometió el pasado primero de enero, cuando asumió su mandato como el jefe del gobierno en la Ciudad de Nueva York que pronto recuperaríamos la normalidad y la tranquilidad como en los tiempos previos a que la pandemia azotara la Ciudad que Nunca Duerme.

Pero ahora inclusive los policías que Adams anunció como parte de una unidad de combate al crimen sufren el ataque de los individuos que encuentran en las calles, como ocurrió esta semana en El Bronx, cuando un oficial resultó herido y el sospechoso que perseguía murió baleado.

Es constante la información que se registra en los medios de comunicación que, como El Diario, reportó hechos similares al robo de más de $130 mil dólares en una joyería atacada a martillazos por varios sospechosos que, aunque quedaron captados en video la policía todavía no ha logrado capturarlos.

Y más recientemente, las cámaras de vigilancia mostraron el abuso y violación de  una mujer en el ascensor de un edificio de apartamentos donde el supuesto pervertido amenazaba con un cuchillo a la aterrada víctima y no contento con su agresión sexual, también le robó.

Previamente a ese grave atropello a la dignidad de la mujer, un inmigrante chino, repartidor de comida, no pudo realizar su entrega porque perdió la vida en medio de un atraco para robarle apenas $5 dólares que llevaba y su teléfono celular.

Y así podríamos seguir de manera interminable contando, uno a uno los crímenes, pero para no hacernos monótonos, queremos preguntarnos ¿hasta cuándo los neoyorquinos tendrán que sufrir estos problemas que nos tienen a todos al borde del ataque de nervios?

Y aunque las estadísticas de NYPD confirman que la delincuencia viene bajando, la sensación es que el crimen sigue al alza, con el robo de autos y el riesgo de la pérdida de vidas.

Por eso es que cuestionamos las voces que en medio de la pandemia pregonaban a los cuatro vientos que debíamos restarle fondos a la policía.

Es cierto que puede haber manzanas podridas en un cuerpo tan diverso y expuesto a tantos casos, pero en lugar de acabar con la fuerza del orden, bueno sería apoyarla como primer paso para recuperar la seguridad.

Sofía Villa es autora y escribe esta columna a título personal. Trabaja como Producer Writer en Univision NY y sus opiniones no representan a Televisa Univision Communications Inc.