De ‘Ellis Island’ a El Bronx
En esta época moderna la historia parece repetirse con familias que serán ubicadas en dos inmensas carpas en Orchard Beach como una nueva isla Ellis
Por más que la Gran Manzana pretenda recibir con brazos abiertos a los miles de solicitantes de asilo provenientes de Florida y Texas, la alcaldía no da abasto para atender esta crisis humanitaria.
Y en ese drama incluyen a casi cinco mil niños, que sin que ellos lo pidieran, están envueltos en una oleada migratoria de personas que buscan una nueva vida aquí en los Estados Unidos.
Es tal la situación que nos recuerda como, hasta 1954 llegaron más de 12 millones de inmigrantes europeos a Ellis Island, en el Puerto de Nueva York, frente a la estatua de la Libertad, con argumentos parecidos a los de los hispanos de hoy: buscan libertad y oportunidades económicas.
En esta época moderna la historia parece repetirse con familias que serán ubicadas en dos inmensas carpas en Orchard Beach, El Bronx, como una nueva isla Ellis, que aunque lejos de la Lady Liberty, será su hogar temporal mientras un juez decide sobre su asilo.
Esas carpas ya generaron críticas. Aunque es la solución que dice el alcalde Eric Adams desarrolla para ayudar a estos nuevos neoyorquinos, las organizaciones sociales aseguran que les faltará privacidad, que se trata de una zona de inundación y que quedarán aislados por falta de transporte, además de que viene el frío invierno, entre otros argumentos.
Si miramos el vaso medio lleno, pese a todo, estos recién llegados corrieron con suerte pues en las aguas del Río Grande o el desierto han recuperado unos 750 cuerpos de fallecidos buscando el sueño americano.
Aunque los europeos del siglo pasado llegaban con sus documentos en busca del apoyo de sus familias o amigos, ahora este proceso de los latinos podría tardar años presionando los servicios sociales; pues requieren educación, alimentos guías para sobrevivir y aprender el idioma o la cultura y sobre todo urgen asistencia legal para volver a empezar.
Allí el Comisionado de Asuntos de Inmigración, Manuel Castro, enfrenta el reto de su vida y para sacar adelante su tarea, ya hay un contrato de asesoría legal por 5 millones de dólares para los años fiscales 2023 y 2024.
Lo grave es que, si bien es cierto que muchos de esos hispanos escaparon de la violencia y temen por sus vidas, es posible que algunos de ellos sean devueltos a sus países, porque huyen es de la inseguridad económica y la agitación o corrupción política y ese argumento no será válido.
Entonces queda en el aire la pregunta: ¿qué pasará si la corte no acepta los argumentos después de haber llegado hasta aquí? Y ese será un nuevo debate.
Sofía Villa es la autora y escribe esta columna a título personal. Sus opiniones no representan a Televisa-Univision Inc. donde trabaja como Writer/Producer.