Mujer encarcelada en Florida ofrece $2 millones a reclusas para que asesinen a sus padres y abuelos; prisioneras denuncian complot a oficiales correccionales
Tureygua Inaru, de 29 años, cumplía una sentencia por amenazar con matar a excompañeros de trabajo en Disney; alegadamente, la sospechosa le indicó a las potenciales matonas que sus padres eran adinerados, y que, si completaban la tarea, recibirían $2 millones de la herencia de estos
Tureygua Inaru fue acusada de tres cargos de solicitar un asesinato premeditado y uno de acoso cibernético. Crédito: Oficina del Alguacil del Condado Osceola | Cortesía
Una mujer que cumple sentencia de cárcel en Florida por amenazar con matar a excompañeros de trabajo en Disney intentó contratar a otras prisioneras para que mataran a sus padres y abuelos a cambio de un pago de $2 millones.
Tureygua Inaru, de 29 años y originaria de Orlando, se encuentra encarcelada desde diciembre.
Desde allí, le habría ofrecido dinero a dos reclusas para que cometieran el crimen, según reportes esta semana de medios como WESH.
Marco López, alguacil del condado Osceola, indicó a la referida televisora que la sospechosa le indicó a las potenciales matonas que sus padres eran adinerados, y que, si completaban la tarea, recibirían $2 millones de la herencia de estos.
Como parte del presunto esquema, Inaru ofreció $50,000 por víctima a quienes aceptaran la oferta.
Además, las autoridades alegan que la criminal acosó cibernéticamente al fiscal asistente estatal Peter Francis Donnelly, que estaba procesando su caso.
La mujer supuestamente dijo que lo quería sufriendo y que no le importaba si la familia de este moría también, detallan documentos judiciales del caso.
La convicta además señaló que si no encontraba nadie que llevara a cabo los asesinatos, ella felizmente realizaría los ataques.
Las compañeras de celda optaron por informar a oficiales de corrección del macabro plan.
Las reclusas indicaron a investigadores que Inaru les dio instrucciones de cómo hacer parecer los asesinatos como un robo fallido.
En enero, la oficina del alguacil envió a un detective encubierto que se hizo pasar como reo a la celda de Inaru.
La sospechosa le manifestó al agente su antipatía hacia el fiscal, pero negó haber tratado de contratar a un sicario para que lo matara.
En una entrevista posterior, Inaru admitió el plan de eliminar a su familia.
La mujer argumentó que su madre y padre abusaron sexualmente de ella y sus hermanos cuando eran niños. Por su parte, parientes declararon a policías que Inaru sufre de problemas mentales.
Este lunes, las autoridades acusaron a la presa de tres cargos de solicitar un asesinato premeditado y uno de acoso cibernético por las alegadas amenazas a Donnelly.
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