Los videos porno deepfake van en aumento: una creciente amenaza digital a la privacidad

El alarmante aumento de videos porno deepfake no consensuales, una insidiosa amenaza digital, podría convertirse en un problema grave

Las herramientas tecnológicas podrían estar cambiando el mundo del porno, pero peligrosamente.

Las herramientas tecnológicas podrían estar cambiando el mundo del porno, pero de manera peligrosa. Crédito: LIONEL BONAVENTURE/AFP | Getty Images

Gigantes tecnológicos como Google se encuentran lidiando con un problema preocupante: el aumento de videos porno deepfake no consensuados.

La explotación malévola de la tecnología deepfake, que comenzó a generar preocupación hace media década, parece que ahora está fuera de control. Esta tecnología emergente emplea el aprendizaje automático para manipular la imagen de un individuo en contenido explícito sin su consentimiento, apuntando predominantemente a mujeres y perpetrando acoso digital.

Un análisis reciente realizado por un investigador independiente y compartido con la revista WIRED ha revelado la desconcertante prevalencia de videos porno deepfake no consensuados.

En los últimos siete años, se han subido la asombrosa cifra de 244,625 vídeos de este tipo a los 35 principales sitios web dedicados exclusiva o parcialmente a albergar estas creaciones explotadoras.

De manera inquietante, el investigador, que optó por permanecer en el anonimato para evadir la orientación en línea, observó un aumento del 54 por ciento en las cargas de videos deepfake durante los primeros nueve meses de este año, en comparación con todo el año 2022.

El pronóstico para 2023 es aún más sombrío, con un aumento previsto que supera todos los años anteriores combinados.

Una industria de abuso de deepfake

El problema se extiende más allá del porno deepfake. En los últimos años, ha surgido toda una industria de abusos deepfake, dirigido principalmente a mujeres, que produce imágenes manipuladas sin consentimiento ni conocimiento.

También se utilizan ampliamente aplicaciones de intercambio de rostros para imágenes fijas y herramientas que permiten el desnudamiento digital, con potencialmente millones de imágenes manipuladas en circulación.

La investigación expone 35 sitios web dedicados total o parcialmente a la pornografía deepfake. Algunos de estos, anuncian abiertamente su contenido deepfake, y los dos principales albergan 44,000 vídeos cada uno.

Otros cinco cuentan con más de 10,000 vídeos deepfake y muchos otros enumeran varios miles. La impactante realidad es que algunos videos han sido vistos millones de veces.

Porno deepfake a nivel mundial

Hace poco surgió el caso de Patrick Carey, un joven de 20 años, quien fue acusado de tomar fotos de las cuentas de las redes sociales de más de una docena de mujeres cuando estaban en la escuela secundaria, alterarlas para hacerlas sexualmente explícitas y luego publicarlas en un sitio web pornográfico.

Este problema trasciende fronteras y el investigador confirma su huella global. Las búsquedas de Google realizadas en varios países, incluidos Canadá, Alemania, Japón, Estados Unidos, Brasil, Sudáfrica y Australia, han mostrado constantemente sitios web deepfake en posiciones destacadas.

Estas falsificaciones digitales a menudo apuntan a celebridades, streamers y creadores de contenido, lo que hace que la difusión de deepfakes sea un problema “endémico”.

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