Corea del Norte apoya a Rusia: ¿qué significa esto para Ucrania?
Hay cada vez hay más señales de que soldados norcoreanos luchan del lado de Rusia en contra de Ucrania. Kiev habla de un nuevo bando en conflicto
El hecho de que hay una cooperación entre Rusia y Corea del Norte no es, en esencia, nada nuevo. En junio, el presidente ruso, Vladimir Putin, viajó a Pyongyang para acordar con el líder norcoreano, Kim Jong-un, una asociación para la seguridad. Anteriormente se había especulado sobre grandes entregas de armas norcoreanas, especialmente proyectiles de artillería.
En 2023, el servicio secreto ucraniano HUR informó que un contingente militar norcoreano limitado había llegado a los territorios ocupados de Ucrania.
Pero los hechos tomaron una nueva dimensión el viernes pasado, cuando el servicio secreto de Corea del Sur (NIS) publicó datos, según los cuales Pyongyang quiere poner a disposición hasta 12,000 soldados para la guerra de Rusia en Ucrania.
Supuestamente hay 3,000 soldados norcoreanos en Rusia
De estos, ya 1,500 habrían desembarcado en la ciudad portuaria rusa de Vladivostok. Entretanto, el NIS habla ya de 3,000 soldados norcoreanos que habrían sido trasladados a Rusia. Según esas informaciones, recibirían uniformes rusos para ocultar sus identidades.
El equipo de verificación de datos de DW pudo confirmar que las imágenes proporcionadas por el NIS muestran lugares en el Distrito Militar Oriental de Rusia. Ni Rusia ni Corea del Norte han confirmado oficialmente todavía los hechos.
“No hay duda de que hay norcoreanos en Rusia”
Todavía hay muy pocas informaciones concretas, y muchas especulaciones, dice a DW Nico Lange, investigador sénior de la Conferencia de Seguridad de Múnich (MSC).
“Pero no hay duda de que hay norcoreanos en Rusia para recibir entrenamiento. Y tampoco hay duda de que, desde hace algún tiempo, concretamente desde poco después de la visita de Vladimir Putin a Pyongyang, equipos de construcción de las Fuerzas Armadas de Corea del Norte están activos en los territorios ocupados en Ucrania.”
Al mismo tiempo, Lange matiza: “No se debe sacar automáticamente de la información que ahora circula la conclusión de que 12,000 soldados norcoreanos luchan junto a los rusos en las trincheras de Ucrania. Eso no es lo que hemos visto hasta ahora”.
Ucrania solicita ayuda occidental contra la nueva alianza de Putin
Sin embargo, desde el punto de vista de Ucrania, esta situación es preocupante. Mientras Putin se presenta como respetado anfitrión en la cumbre de los BRICS, Kiev está preocupado por recibir más apoyo militar.
El llamado “Plan de la victoria” del presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, no logró generar ningún impulso. Y Ucrania teme que si Donald Trump gana las elecciones presidenciales estadounidenses, a principios de noviembre, quiera cortar la ayuda armamentista. Trump recientemente incluso culpó a Zelenski por la invasión de Rusia en un podcast reciente.
Zelenski dejó en claro el fin de semana, que los socios de su país, invadido por Rusia, tenían que responder a las “evidencias claras”: “No debemos dejar que el mal crezca. Si el mundo guarda silencio ahora y si pronto vemos soldados norcoreanos en el frente, si vemos cómo luchamos contra los shaheds [drones kamikazes de fabricación iraní, N. de la Red.], eso no beneficiará a nadie en el mundo y sólo prolongará la guerra”, enfatizó el presidente ucraniano.
Occidente reacciona con cautela
La forma en que Estados Unidos reaccione ahora es crucial. Después de todo, Washington no sólo es el mayor apoyo de Ucrania, sino también una potencia protectora para Corea del Sur. Estados Unidos fue también el primer miembro de la OTAN en hablar de “pruebas” de la presencia de tropas norcoreanas en Rusia.
Más allá de eso, el secretario de Defensa de EE. UU., Lloyd Austin, se mantuvo cauteloso: “¿Qué están haciendo exactamente allí? Eso está por verse. Si tienen la intención de participar en esta guerra en nombre de Rusia, entonces ese es un problema muy, muy serio”, dijo en Roma.
Un problema que, sin embargo, será tema para la próxima administración en EE. UU., encabezada por Donald Trump o por Kamala Harris.
Esperan a las elecciones de EE.UU.
También Europa esperará a las elecciones en Estados Unidos, el 5 de noviembre, opina Nico Lange: “Por el momento no veo que los grandes Estados de Europa se estén uniendo para desarrollar una estrategia común.
¿Qué queremos lograr en Ucrania? ¿Qué estamos haciendo contra la propia Rusia y contra los que apoyan a Rusia? ¿Y cómo vamos a actuar conjuntamente? Pero eso es lo que hace falta”, dice Lange.
Una portavoz de la OTAN en Bruselas dijo que si estas tropas estuvieran destinadas a luchar en Ucrania, eso representaría “una escalada significativa en el apoyo de Corea del Norte a la guerra ilegal de Rusia y una señal más de las pérdidas de Rusia en el frente”.
La alianza evalúa los próximos pasos a dar. El hecho de que Europa no haya reaccionado aún ante el supuesto despliegue de tropas norcoreanas es una “omisión fatal”, afirma Roderich Kiesewetter, de la conservadora Unión Demócrata Cristiana (CDU), experto en política exterior del mayor partido de la oposición alemana en el Bundestag.
Es imperativa una respuesta unida y decisiva de disuasión, dijo, añadiendo que varios países europeos también lo quieren, pero que Alemania “debe cambiar finalmente su postura” respecto de ello.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Alemania convocó al encargado de negocios de Corea del Norte y aludió a la seguridad de Alemania y el orden de paz europeo, amenazados por el apoyo a la agresión bélica rusa.
Rusia y Corea del Norte se benefician, por ahora
Mientras aumentan los indicios de una mayor cooperación entre Rusia y Corea del Norte, DW habló con Andrei Lankov, profesor de Historia y Relaciones Internacionales en la Universidad Kookmin de Seúl, la capital de Corea del Sur.
Rusia podría sacar provecho al evitar una movilización masiva de soldados en el país. “La guerra es generalmente popular en Rusia, pero sólo cuando la mayoría de la gente no participa en los combates y la guerra no afecta su vida cotidiana”, subrayó Lankov.
En su opinión, cada vez hay menos hombres en Rusia dispuestos a arriesgar su vida, incluso por beneficios económicos como los que ofrecen los contratos militares.
Como contrapartida, Corea del Norte quiere dinero y tecnología. “Un soldado contratado en el Ejército ruso recibe $2,000 dólares al mes, más un bono único que puede ser de hasta $20,000 dólares”.
“Pyongyang estaría feliz de recibir al menos la mitad de eso por cada soldado desplegado“, dijo Lankov. La tecnología moderna es igualmente buscada: “En otras circunstancias, Rusia nunca estaría dispuesta a compartir tecnología con un país tan inestable, pero ahora no tiene otra opción”.
Pero el experto cree que la colaboración no durará. Tras el fin de la guerra en Ucrania, las relaciones volverían a su nivel anterior, dado que entonces Corea del Norte ya no sería económicamente interesante para Moscú.
Sigue leyendo: