Deja la puerta de la secadora abierta para ahorrar dinero
Dejar la puerta de la lavadora abierta puede prevenir moho, mejorar eficiencia y reducir costos de energía
La forma en que dejamos la puerta de la secadora puede tener un gran impacto en la eficiencia del electrodoméstico y en nuestros costos de energía.
Aunque parece un detalle menor, esta acción puede afectar tanto la salud del aparato como el ambiente en el que se utiliza.
Los peligros de dejar la puerta cerrada
Cuando finaliza el ciclo de lavado, muchos usuarios optan por cerrar la puerta de la lavadora de inmediato.
Esta práctica, aunque común, puede acarrear problemas graves.
Al cerrar la puerta, se atrapa la humedad en el tambor, creando un ambiente propicio para el crecimiento de moho y bacterias.
Esta acumulación de humedad no solo provoca malos olores, sino que también reduce la eficiencia del electrodoméstico.
Un estudio indica que dejar la puerta abierta después de cada uso permite la circulación del aire, lo que ayuda a mantener el interior seco y fresco.
De hecho, las máquinas que se ventilan adecuadamente tienden a funcionar de manera más eficiente, lo que puede llevar a un ahorro en el consumo de agua y electricidad.
Beneficios de mantener la puerta abierta
1. Prevención de moho y hongos: al permitir que circule el aire, se disminuye la posibilidad de que se formen moho y hongos en el tambor.
2. Mejora de la eficiencia: una lavadora seca opera de manera más efectiva, utilizando menos recursos en cada ciclo de lavado.
3. Ahorro energético: un entorno limpio y seco reduce la cantidad de agua y electricidad que se utiliza, lo que se traduce en facturas más bajas.
4. Eliminación de olores desagradables: mantener la puerta abierta ayuda a erradicar los olores a humedad que pueden transferirse a la ropa.
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