En NYC 13,000 familias con ‘vales de viviendas’ en sus manos no tienen a dónde mudarse
Orden judicial obliga a la Ciudad a expandir el subsidio de CityPHEPS

Aunque hay miles de familias con los vales de vivienda, no existe oferta habitacional que acepte estos subsidios. Crédito: Carmen Villavicencio | Impremedia
El ‘Suplemento Municipal para la Lucha contra la Falta de Vivienda y la Prevención de Desalojos’, conocido técnicamente como CityPHEPS y popularmente como ‘vales de vivienda’, se encuentra en un momento decisivo para su ampliación, luego de meses de pugnas judiciales entre el Concejo Municipal y el alcalde Eric Adams. Una pugna que está lejos de terminar.
En este momento, el Concejo con el aval de un tribunal, presionan para que se emitan más vales, la Ciudad argumenta que miles de familias con este beneficio aprobado en sus manos, igual se mantienen en los albergues, porque simplemente no existe oferta habitacional, que acepten estos subsidios.
En pocas palabras, una corte de apelaciones ordenó a la Ciudad de Nueva York cumplir con cuatro leyes aprobadas en 2023, pero vetadas por el alcalde Eric Adams. Estos textos legales disponen que más personas, que no viven en albergues municipales, tengan acceso a este beneficio, terminando con barreras como niveles de ingreso, contar con un empleo y otros requisitos.
Lo más relevante de las nuevas normas, que la Ciudad estaría obligada a acatar, es que CityFHEPS no deberá estar solo disponible para personas o familias que perdieron por alguna razón su vivienda, y terminaron en un albergue para personas sin hogar. Se ordena que las personas con problemas para poder pagar el alquiler y estén al borde de quedarse en la calle, no necesiten ingresar al sistema de albergues, para calificar para un vale de vivienda financiado por la ciudad.
Las nuevas reformas del Concejo además prohibirían a los propietarios, deducir el costo de las facturas de servicios públicos de un vale, aumentarían el límite de ingresos para calificar para la ayuda y eliminarían los requisitos de constancia de trabajo.
Con vale, pero sin casa
La orden judicial de la semana pasada ordena al mandatario municipal a presentar un plan a la Oficina Estatal de Asistencia Temporal y para Personas con Discapacidad para la puesta en marcha, sin excepciones, del paquete legal. Pero el equipo del mandatario municipal se mantiene reacio por considerar estas reformas, argumentando varios ángulos técnicos “inconvenientes”: Hasta este martes, a 13,000 familias, la Ciudad le ha asignado un vale. Y no encuentran un sitio estable, a dónde mudarse.
“En este momento añadir más vales, solo dificultará que las personas en los refugios para personas sin hogar, consigan una vivienda estable. La crisis de vivienda asequible, no se resolverá haciendo que las personas que viven en un refugio y quienes ya están en su vivienda, en riesgo de ser desalojadas, compitan por viviendas inexistentes. Estamos haciendo lo correcto, que es ampliar el número de unidades. Todo lo demás, es irreal”, indicó a El Diario un portavoz del alcalde.
La Ciudad subraya que están revisando sus opciones legales y haciendo un esfuerzo por conectar a las personas, que ya tienen vales, con unidades residenciales.
En un momento en donde apenas hay un 1.8% de viviendas vacantes en la Gran Manzana, quienes son beneficiarios de estos vales, pueden durar meses, antes de que puedan conectar con un propietario que los acepte. A pesar de que hay reglas municipales que prohíben claramente este tipo de discriminación.
De acuerdo con datos de agencias municipales, si bien los pagos de vales, se han destinado a casi todos los 200 códigos postales de la ciudad, estos han podido ser utilizados en muy pocos vecindarios.
Dos códigos postales que abarcan partes El Bronx a lo largo de la Avenida Tremont recibieron más pagos de vales que cualquier otro. Estas dos localidades albergan solo el 1.5% de la población de la ciudad, pero más del 8% de todos los vales de CityFHEPS.
El Bronx alberga el 46% de los beneficiarios de vales, Manhattan el 10%. En el caso de Queens, en donde residen más de 2 millones de neoyorquinos, recibió solo 6,700 de los casi 45,000 del programa asignados hasta septiembre del año pasado.
“Los ‘landlords’ siempre buscan una excusa, porque existe un estigma sobre quienes han vivido en un albergue. Piensan que no somos personas confiables, que hemos sido criminales, que vamos a generar problemas en la propiedad. Es como tener un boleto ya pagado para volar, pero no te permiten montarte en el avión”, compartió una madre soltera migrante venezolana, que desde el pasado diciembre está tratando de salir del sistema municipal de refugios.
“Se debe acatar”
El programa de vales de vivienda comenzó en 2019, bajo la Administración de Bill de Blasio, como parte de un esfuerzo para reducir el número de personas en albergues, garantizando que los hogares de bajos ingresos no paguen más del 30% de sus ingresos en alquiler.
Desde entonces, legisladores y defensores han presionado para que el programa se amplíe, pero se han topado con la resistencia de la administración Adams, quien ha argumentado en varias oportunidades, que estas reformas “no son realistas”, para resolver la espantosa crisis de vivienda en la Gran Manzana.
“Esto se debe acatar y punto. La expansión de CityFHEPS brindará a miles de familias que enfrentan el desalojo y la falta de vivienda un auxilio muy necesario, brindándoles la oportunidad de construir un hogar con estabilidad. Esperamos continuar la lucha para garantizar que todos los que consideran esta ciudad su hogar, independientemente de su estatus migratorio, tengan acceso a una vivienda segura. Todos los neoyorquinos merecen el apoyo que necesitan para pasar de apenas sobrevivir a prosperar”, reaccionó Murad Awawdeh, presidente de la Coalición de Inmigración de Nueva York (NYIC), al conocer el fallo judicial.
“Cuestan más los albergues”
Las estimaciones del costo de la ampliación de estos subsidios para las arcas municipales varían considerablemente.
De acuerdo con el informe de impacto fiscal del Concejo Municipal, se estima que la ampliación rondaría $10,600 millones de dólares en un período de cinco años. Las cuentas de la oficina presupuestaria de la alcaldía, proyectan que la ampliación costaría a la Ciudad, muchísimo más: $17,200 millones de dólares en cinco años.
En este sentido, la vicepresidenta del Concejo, Diana Ayala, quien representa a partes del Alto Manhattan y el sur del Bronx, cuestiona los intentos por bloquear la expansión de este subsidio, señalando que a la Ciudad le cuesta más alojar a personas en albergues para personas sin hogar, que mantenerlas en su apartamento actual, con un vale de vivienda.
“Si una persona tiene un apartamento y de todos modos calificaría… ¿por qué no simplemente mantenerla en su apartamento y permitirle solicitarlo?”, se preguntó Ayala en una sesión de la cámara municipal.
En contraparte, la administración Adams afirma haber proporcionado vales a alrededor de 10,000 familias que no vivían en albergues el año pasado, dirigidos a los residentes más vulnerables de Nueva York, como veteranos, residentes con discapacidad y hogares con historial de alojamiento en albergues que actualmente, no se encuentran en situación de calle.
Las cuatro leyes:
- La ley 99 impide que el Departamento de Servicios Sociales deduzca la asignación de servicios públicos, del monto máximo de un vale de CityFHEPS.
- La ley 100 elimina la estancia en un albergue como requisito previo para la elegibilidad a estos subsidios.
- La ley 101 elimina varios requisitos de elegibilidad para permitir que los solicitantes en riesgo de desalojo o en situación de calle, accedan a este subsidio.
- La ley 102 cambia la elegibilidad para un vale de CityFHEPS del 200% del nivel federal de pobreza, al 50% del ingreso medio de la zona. Además de eliminar los requisitos existentes de trabajo e ingresos.