¿Por qué el TLCAN podría haber llegado a su fin?
Las negociaciones se complican y México es el peor parado
La siguiente ronda de negociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte será a mediados de noviembre, pero el gobierno del presidente Donald Trump ya adelantó que sólo habrá un nuevo acuerdo si no beneficia al país.
“Probablemente lograremos renegociarlo, pero si no es renegociado de manera exitosa, para que sea justo para Estados Unidos, entonces será terminado”, indicó el mandatario en una entrevista a Fox News.
Aunado a ello, las administraciones de México y Canadá, lideradas por Enrique Peña Nieto y Justin Trudeau, respectivamente, mantienen su postura contra la cláusula del gobierno estadounidense para concluir el acuerdo comercial cada cinco años, en forma automática.
Hay, sin embargo, un tema que se colocó en la palestra: EEUU y Canadá podrían lograr un tratado bilateral, nada está fuera de la mesa, y de ser así, México sería el que mayor perdería ante ello.
“(Trudeau) explicará claramente al presidente (Trump) que Canadá no es el problema de Estados Unidos”, señaló la canciller canadiense Chrystia Freeland previo a la visita de la visita oficial del canadiense. “Somos su mayor cliente”.
Hay incertidumbre, por lo cual el gobierno mexicano se prepara para ese escenario, aunque la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders, afirmó que “el Tratado no está muerto”, pero luego hizo una pausa durante su conferencia de prensa y agregó: “Todavía”.
Sobre la posibilidad de que, en forma unilateral, el presidente Trump concluya el acuerdo, es un terreno complicado, ya que podría enfrentar una traba del Congreso y la presión de empresarios, principalmente de la industria automotriz.
“Este es un territorio inexplorado donde nadie lo sabe”, aseguró al Wall Street Journal, Warren Maruyama, un ex funcionario comercial de Ronald Reagan y de las dos administraciones de los Bush.
Para Tim Meyer, profesor de derecho en la Universidad de Vanderbilt, es probable que el presidente Trump enfrente “presiones legales si decide terminar el Tratado… especialmente de la industria automotriz”, indicó, debido a que se ha vuelto dependiente del TLCAN para operar en la región. “Verán a la industria automotriz en la corte el día después de que se envíe esa notificación, buscando una orden judicial”.
La iniciativa “México, ¿cómo vamos?” destaca también la importancia para ese país el acuerdo comercial en la industria automotriz con un dato contundente: “Las autopartes cruzan las fronteras de los tres países… ocho veces antes de que se termine de producir cada vehículo”.
#Infobite ¿Por qué es importante el #TLCAN para la industria automotriz? Entérate aquí: pic.twitter.com/g1JxQL4QSb
— México, ¿cómo vamos? (@MexicoComoVamos) October 22, 2017
Las proyecciones sobre el mercado laboral sin el Tratado dejan a México muy mal parado, con un estimado de hasta 10 millones de empleos menos, aunque hay estimaciones que reducen esa cifra a la mitad, según Expansión/CNN y El Financiero.
Se destaca, por ejemplo, que las industrias que más se afectarían sería ropa, alimentos y máquinas y otros elementos, según ImpactECON, que no desarrolló las pérdidas de empleo por sector en el escenario más complicado.
No hay tampoco un nuevo análisis de crecimiento por nación sin el acuerdo, pero para este año, en la región comercial, sólo se aparta Canadá, con casi un punto porcentual de diferencia, pero México, en sus propias dimensiones, apenas queda abajo de EEUU un .01%.
¿Cuáles son las perspectivas de crecimiento para 2017 de los países del TLCAN, de acuerdo con el FMI? pic.twitter.com/sy5hS1EFGB
— México, ¿cómo vamos? (@MexicoComoVamos) October 23, 2017
Los representantes mexicanos, liderados por los secretarios de Hacienda, Luis Videgaray, y de Economía, Ildefonso Guajardo, buscan aliados en el Congreso estadounidense y entre los líderes de los sectores en EEUU que podrían ser afectados si se cancela el acuerdo, reportó El País.
Guajardo, incluso, ha reconocido en otras ocasiones que México tiene claro que podría ser el fin y, aseguró, se debe trabajar en un “Plan B”, sobre todo en las entidades, para enfrentar la consencuencias, aunque los empresarios mexicanos no ven cómo se detendría ese impacto.
“El tratado genera certidumbre legal para la inversión extranjera, en cualquier escenario negativo tenemos que ir al legislativo a garantizar nuestros propios procesos”, expresó en una reunión de la con la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago) de septiembre pasado. “Esas garantías que en un momento determinado los inversionistas estadounidenses estarían perdiendo”.